Munar niega el cobro de comisiones por la venta de un solar
El juicio por el «caso Can Domenge» continúa con la declaración ante el juez de acusados y de testigos

La expresidenta del Consejo de Mallorca y de Unión Mallorquina (UM), Maria Antònia Munar , ha declarado esta mañana como acusada en la Audiencia Provincial en el juicio del llamado «caso Can Domenge», en el que se investiga la presunta venta irregular de los terrenos del mismo nombre por parte de la institución insular a Sacresa. A preguntas del fiscal, Munar ha negado el cobro de comisiones , ni para ella ni para UM, desmintiendo así lo afirmado ayer por el exconsejero de Territorio, Bartomeu Vicens , quien dijo que le habría entregado a Munar primero 450.000 euros y luego dos millones de euros para el partido.
La exlíder de UM ha negado «rotundamente» que en este caso haya habido «reparto de comisiones», y ha insistido en que quería que eso quedase «muy claro». Según ha afirmado, ni siquiera sabía que el solar que se iba a vender «se llamaba Can Domenge». De ser ciertas sus palabras, Munar «no sabía nada» ni participó en la elaboración del pliego de condiciones, «porque ese no es el trabajo de una presidenta». Por lo que se refiere al expediente administrativo, Munar sólo lo habría conocido muy recientemente: «Lo he tenido que estudiar a raíz de mi imputación».
Esta segunda parte de su declaración coincide con la del exvicepresidente de la institución insular, Miquel Nadal , quien poco antes había señalado ante el juez que Munar desconocía los contactos mantenidos con Sacresa para llegar a un acuerdo sobre la adjudicación del solar de Can Domenge. De este modo, Munar quedaría exculpada, al menos en parte, de ser la instigadora de supuestas irregularidades en la convocatoria del concurso.
Nadal ha corroborado este jueves en parte los argumentos expuestos ya en el escrito que entregó ayer poco antes de la reanudación del juicio . En dicho escrito se señalaba que, al parecer, Sacresa habría inspirado las bases del concurso público convocado en 2005 para la venta de los citados terrenos. Todo ello con la connivencia de Nadal y del exconsejero de Territorio, Bartomeu Vicens. De este modo, esta empresa pretendía garantizarse la adjudicación de Can Domenge, que además se habría asegurado luego con el pago de un soborno de cuatro millones de euros. Este último punto fue confirmado ayer ante el juez por el propietario de Sacresa, Román Sanahuja.
En su declaración de hoy, Nadal ha matizado que el proceso administrativo que se siguió hasta la adjudicación del solar habría sido, pese a todo, «impecable», pues el supuesto soborno se habría planteado sólo «en el momento de la adjudicación».La afirmación de Nadal ha provocado que el fiscal Pedro Horrach haya considerado que hay contradicciones en las revelaciones del expolítico. Nadal también ha señalado que sobre el supuesto soborno -cohecho- declarará voluntariamente en el Juzgado pertinente. En cuanto al intermediario encargado de recoger el mencionado soborno, habría sido una «persona cercana» a Bartomeu Vicens. Una parte del dinero negro entregado habría sido destinada, sin saberlo Sacresa, a la campaña electoral de Nadal como candidato a la Alcaldía de Palma en 2007.
Por la tarde ha declarado, en calidad de testigo, José Luis Ballester , que en la legislatura 2003-2007 era el director general de Deportes del Gobierno balear, que en aquel momento presidía el popular Jaume Matas. Ballester ha recordado que una parte de los terrenos del entorno de Can Domenge fue cedida por el Consejo de Mallorca al Ejecutivo autonómico para la construcción del Palma Arena, mientras que la otra parte quedó en manos de la institución insular. El Gobierno regional buscaba en aquella época un espacio en el que poder construir un velódromo y optar así a la organización del Mundial de Ciclismo de 2007, evento que finalmente se celebró en la capital balear.
Según Ballester, Matas se habría llevado las manos a la cabeza al ver qué parte de dichos terrenos le quedaría a cada institución una vez hecha la segregación prevista. A preguntas del fiscal, el exdirector general ha reconocido que Matas habría dicho algo parecido a «ya me la ha metido Munar» .
Se da la circunstancia de que la construcción del citado equipamiento deportivo está siendo investigada en otra causa judicial, el llamado «caso Palma Arena», que ha sido dividido en más de veinte piezas, dada la complejidad de los asuntos que están siendo analizados por la Fiscalía y el juez instructor, José Castro.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete