Imputan a tres médicos de Alicante por el robo de un bebé en la década de los 80

Estas diligencias previas fueron incoadas hace un año, aproximadamente, a instancias de la Fiscalía, después de que se constatara que el ADN de unos restos óseos pertenecientes a una niña recién nacida, exhumados en el lugar del cementerio de Alicante donde se supone que había sido enterrada, no coincidía con el de la madre.

Durante este tiempo, el magistrado que investiga el caso ha tomado declaración en calidad de imputados a dos ginecólogos de la clínica donde la denunciante dio a luz y al pediatra que firmó el certificado de defunción. Se trata de los primeros encausados en un proceso penal por supuestos robos de bebés en la provincia hasta el momento.

Los tres facultativos, que ya están jubilados, han negado que la niña hubiese sobrevivido al parto y que ellos participaran en un secuestro posterior para darla en adopción, según las fuentes consultadas.

El juzgado ha ordenado la práctica de otras diligencias para esclarecer lo ocurrido, entre las que destacan gestiones encaminadas a localizar a una religiosa responsable de una entidad donde eran trasladados los recién nacidos en esta clínica alicantina cuyas madres decidían darlos en adopción.

El fiscal decano de Menores de Alicante, Carlos Ferreirós, que tramita todas las denuncias en esta provincia por presuntos robos de bebés y adopciones irregularidades ha rehusado ofrecer cualquier detalle sobre la causa para preservar la intimidad de los denunciantes. Únicamente ha confirmado que el caso se encuentra bajo investigación después del resultado de los análisis de ADN.