«Putin lo mató»
La viuda de Navalni anuncia que entra en política y denuncia que su marido fue envenenado con Novichok
A través de un potente mensaje grabado en vídeo, Julia Naválnaya se muestra decidida a continuar con la obra de su marido
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Corresponsal en Moscú
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Iniciar sesiónJulia Naválnaya, la esposa del opositor ruso muerto el viernes, Alexéi Navalni, ha anunciado este lunes a través de un vídeo difundido en YouTube que ha tomado la decisión de entrar en política, sustituir a su marido y continuar la lucha contra las actuales autoridades del país ... hasta lograr «una Rusia libre, pacífica y feliz».
«Hola, soy Julia Naválnaya. Hoy por primera vez en este canal quiero dirigirme a ustedes. No debería estar en este lugar. No debería haber grabado este vídeo. Debería haber otra persona en mi lugar, pero esa persona fue asesinada por Vladímir Putin», así comenzaba ella su emotiva, densa e impactante alocución. Según sus palabras, «hace tres días Vladímir Putin mató a mi marido, mató al padre de mis hijos, me quitó lo más preciado que tenía, la personal para mí más cercana y querida, pero os ha quitado Navalni también a vosotros».
«En algún sitio, en una colonia en el norte extremo, más allá del Círculo Polar Ártico, en un invierno eterno, Putin mató a algo más que a un hombre. Junto con él, ha querido matar nuestras esperanzas, nuestra libertad, nuestro futuro. Ha querido destruir la mejor prueba de que Rusia puede ser de otra manera, de que somos fuertes, valientes, que creemos y luchamos desesperadamente porque queremos vivir de forma diferente».
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Años de lucha
Naválnaya recuerda sus años vividos junto a su marido: las manifestaciones, los arrestos domiciliarios, los registros domiciliarios, encarcelamientos, su envenenamiento y su pena de cárcel tras regresar de recibir tratamiento en Alemania. Mostrando una imagen en la cárcel en compañía de Navalni, Julia afirma que «este es mi último encuentro con él, a mediados de febrero de 2022, nuestra última foto. Exactamente dos años después, Putin lo matará».
«Todos estos años he estado al lado de Alexéi y he estado feliz de ello y de apoyarlo, pero hoy quiero estar con vosotros porque sé que habéis perdido tanto como yo. Murió en aquella colonia después de tres años de calamidades y torturas. No era un recluso como les demás, lo torturaron, lo mantuvieron en una celda de castigo, en una caja de hormigón (…) un cubículo de seis o siete metros cuadrados en donde no hay nada excepto un taburete, un lavabo, un agujero en el suelo, en lugar de un inodoro, y un camastro fijado a la pared para que no pueda acostarse. Una taza, un solo libro (uno) y un cepillo de dientes, nada más. Así cientos de días».
Naválnaya cuenta también que «aislado del mundo, no le dieron un papel y un lápiz para escribirme una carta a mí o a nuestros hijos. Le hicieron pasar hambre, tres años sin la alimentación debida. Y no sólo no se rindió, sino que siguió apoyándonos, no animó, se reía, bromeaba. Ni por una fracción de segundo tuvo dudas sobre la razón por la que luchaba y sufría».
«No había forma de doblegarlo y esa es exactamente la razón por la que Putin lo mató. Un hombre vergonzante, cobarde, que ni se atrevió a mirarlo a los ojos o simplemente llamarlo por su nombre. Y con la misma vileza y cobardía ahora esconden su cuerpo, no quieren mostrárselo a su madre, no se lo quieren devolver, mienten patéticamente y esperan a que desaparezcan las trazas de este nuevo envenenamiento de Putin con Novichok», denuncia Naválnaya mientras sus ojos rebosaban lágrimas ligeramente.
Próximas revelaciones
Anunció además que «sabemos exactamente por qué Putin mató a Alexéi hace tres días. Te lo contaremos pronto. Descubriremos sin falta quién exactamente y cómo cometió este crimen. Daremos nombres y mostraremos caras».
«Pero lo principal que podemos hacer, por Alexéi y por nosotros mismos, es seguir luchando. De forma más intensa, más desesperada, más furiosa que antes. Sé que parece que es imposible todavía más, pero se necesita más. Juntémonos todos en un puño fuerte y golpeemos con él a este régimen enloquecido, a Putin, a sus amigos, a los bandidos de uniforme, a los ladrones y asesinos que han machacado nuestro país», añadió.
Después recordó que Navalni regresó a Rusia desde Alemania pudiendo haberse quedado allí estando en libertad con su familia. «¿Por qué se arrojó voluntariamente a las garras de quienes ya casi lo mataron una vez? ¿Por qué tal sacrificio? Después de todo, podría vivir en paz, cuidar de sí mismo y de su familia». «Pero no pudo, Alexéi amaba a Rusia más que a nada en el mundo. Os amaba a vosotros, creyó en todos nosotros, creyó en nuestra fortaleza, en nuestro futuro, en que merecemos algo mejor (…) y lo creía de forma tan profunda y sincera que estuvo dispuesto a dar su vida por ello. Y su gran amor nos basta para continuar su obra. Durante el tiempo que sea necesario. Con tanta fiereza y audacia como lo hizo Alexéi», declaró en lo que es un evidente manifiesto político de gran calado.
«Al matar a Alexéi, Putin mató a la mitad de mi ser, la mitad de mi corazón y la mitad de mi alma. Pero todavía tengo la otra mitad y me dice que no tengo derecho a rendirme»
Julia Naválnaya
Aseguró que «al matar a Alexéi, Putin mató a la mitad de mi ser, la mitad de mi corazón y la mitad de mi alma. Pero todavía tengo la otra mitad y me dice que no tengo derecho a rendirme. Continuaré el trabajo de Alexéi Navalni. Continuaré luchando por nuestro país y les animo a estar a mi lado para compartir no sólo la pena y el dolor interminable que nos envuelve y no nos deja. Les pido que compartan mi rabia, ira y odio hacia quienes se atrevieron a matar nuestro futuro. Me dirijo a vosotros con las palabras de Alexéi, en las que realmente creo: no es una pena hacer poco, es una pena no hacer nada. Es una pena dejarse intimidar».
Naválnaya terminó su mensaje señalando que «necesitamos aprovechar todas las oportunidades para luchar contra la guerra, contra la corrupción y contra la injusticia. Luchar por unas elecciones justas y la libertad de expresión. Luchar para recuperar nuestro país. Por una Rusia, libre, pacífica, feliz, la maravillosa Rusia del futuro con la que tanto soñaba mi marido. Eso es lo que necesitamos. Quiero vivir en una Rusia así. Quiero que Alexéi y mis hijos vivamos en él. Quiero construirlo con vosotros, exactamente como lo imaginó Alexéi Navalni: lleno de dignidad, justicia y amor. Sólo así y no de otra manera. Es posible que el inimaginable sacrificio que hizo no haya sido en vano. Lucha y no te rindas. No tengo miedo y tú tampoco deberías tener miedo de nada».
Larga espera
Liudmila Naválnaya, madre de Navalni, volvió este lunes a acudir a la morgue de Salejard, la capital administrativa de Yamal, con la intención de solicitar de nuevo la entrega del cuerpo de su hijo, o al menos poderlo ver. Pero sigue sin conseguir ni una cosa ni la otra tres días después de que el Servicio Federal Penitenciario de Rusia (FSIN en sus siglas en ruso) informara del deceso.
«La madre de Alexéi y sus abogados llegaron a la morgue a primera hora de la mañana. No se les permitió entrar. A uno de los abogados lo echaron literalmente a empujones», escribió en X (Twitter) la portavoz del equipo del político fallecido, Kira Yarmish. Según sus datos, el Comité de instrucción de Rusia advirtió que la investigación para esclarecer lo sucedido «se ha prolongado y no saben cuánto tiempo durará. La causa de la muerte sigue sin poderse determinar». Yarmish cree que «mienten, intentan ganar tiempo y ni siquiera lo ocultan».
Preguntado al respecto, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo que no es tarea de la Presidencia rusa encargarse del cadáver de Navalni y pidió «esperar a la investigación. Por ahora, no se ha llegado a ninguna conclusión». Peskov deploró las acusaciones lanzadas contra el presidente Vladímir Putin que calificó de «odiosas».
La madre de Navalni ya acudió el sábado a la cárcel en donde estaba su hijo y le dijeron que fuera a la morgue de Salejard, a donde se traslado ese mismo día, pero allí negaron tener el cuerpo. Putin, que nunca llamó a Navalni por su nombre, no ha hecho todavía ningún comentario. Él es uno de los cuatro candidatos en liza a las elecciones presidenciales de los próximos 15,16 y 17 de marzo.
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