Rusia ataca Kostiantynivka y deja al menos 17 muertos y 28 heridos

Es el ataque más mortífero de los últimos meses. En las imágenes que circulan por internet y que fueron compartidas por el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en las redes sociales, se puede observar el momento exacto de la fortísima explosión. Varias personas corren a refugiarse y otras huyen del lugar. En otro vídeo se puede ver sangre en el piso de una farmacia. Una agente policial afirma en la grabación que «en el momento del ataque había civiles aquí, estaban comprando medicinas y esto es lo que pasó. Aquí murió gente, todo el suelo está cubierto de sangre».

Como resultado del bombardeo con misiles, más de veinte locales comerciales y varias líneas eléctricas resultaron dañados. Los servicios de emergencia acudieron al lugar para sofocar el fuego que incendió unas treinta secciones del mercado. Un edificio residencial y otro administrativo también sufrieron daños.

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El presidente Zelenski envió sus condolencias a los familiares de los fallecidos y afirmó en su cuenta de X, antigua red social conocida como Twitter, que «los terroristas rusos atacaron un mercado, tiendas y una farmacia, matando a personas inocentes […] Cualquiera en el mundo que todavía esté lidiando con algo ruso simplemente ignora esta realidad. Maldad atroz. Maldad descarada».

Más tarde, en una conferencia con la primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, el mandatario ucraniano denunció que se trata de un ataque «deliberado» contra la población civil: «Quienes conocen este lugar saben muy bien que es una zona civil. No hay unidades militares cerca».

Denise Brown, coordinadora humanitaria de Naciones Unidas para Ucrania, también rechazó la acción rusa. «El despreciable ataque que hace unas horas afectó a un mercado concurrido en Konstantinivka, en la región de Donetsk, brutalizó a los civiles de esta comunidad devastada por la guerra, matando e hiriendo a decenas de adultos y niños», declaró Brown.

Desde la ONU se pide respeto por el Derecho Humanitario y se recuerda que atentar de forma deliberada contra la población o la infraestructura civil es un crimen de guerra.

Konstantinivka está situada a unos 30 kilómetros de la casi desaparecida localidad de Bajmut. Su cercanía al frente de guerra pone a esta ciudad, al igual que a otras localidades del Donbass, al alcance de la artillería y los mísiles rusos. Esta ciudad industrial antaño tenía una población que alcanzaba aproximadamente las 70.000 personas, como la vecina y tristemente famosa Bajmut. A día de hoy todavía quedan cientos de civiles en el lugar que no están dispuestos a marcharse.

Rusia realizó durante la jornada del miércoles más ataques contra territorio ucraniano mientras se esperaba la llegada del secretario de Estado, Antony Blinken. Horas antes de que Blinken entrase en Kiev, Moscú lanzó varios misiles contra la capital. También se produjeron bombardeos en la región de Odesa.