Polonia promete convertir su Ejército terrestre en «el más fuerte de Europa» para frenar a Rusia
El Ministerio de Defensa polaco se prepara para una maniobra de contención ante el progresivo acumulamiento de tropas en la frontera con Bielorrusia
Polonia acelera en su desrusificación y devuelve el nombre polaco al enclave ruso de Kaliningrado
El concepto de 'Blitzkrieg' (Guerra Relámpago), que permitió a Hitler invadir con rapidez Polonia, consistía en la alta concentración en un frente angosto de armas ofensivas con las que, una vez dada la orden, se abría en pocas horas una brecha en las defensas enemigas, ... que permitía a su vez la penetración de las divisiones de tanques. Polonia ha aprendido de su historia y, ahora que Rusia concentra tropas y equipos en la frontera entre Bielorrusia y Polonia, equipos que incluyen armas nucleares tácticas, el Ministerio de Defensa polaco se prepara para una maniobra de contención.
«El objetivo es disuadir al agresor», ha especificado el ministro Mariusz Blaszczak, al anunciar el despliegue inminente de los primeros lanzamisiles M142 HIMARS, de fabricación estadounidense, en su frontera noreste. Desde la base militar de la 16ª Brigada de Artillería del Ejército, a las afueras de Varsovia, Blaszczak ha explicado que los primeros 20 HIMARS, parte del lote comprado en febrero de 2019 por unos 380 millones de euros, ya están siendo instalados. Y espera desplegar 20 baterías en total antes de final de año.
La primera entrega equipará una unidad militar radicada en Olsztyn, a unos 80 kilómetros de la frontera con el enclave ruso de Kaliningrado y «reforzarán el Ejército polaco y el flanco oriental de la Alianza Atlántica». Y esto es sólo el principio. El Congreso de Estados Unidos ya ha aprobado el suministro de hasta 500 unidades que irán llegando a Polonia a medida que sean fabricadas. En la versión polaca, están equipados con munición de misiles guiados GMLRS, de un alcance de 70 kilómetros, y misiles tácticos ATACMS, capaces de atacar objetivos ubicados a más de 300 kilómetros. Los lanzadores HIMARS (High Mobility Artillery Rocket System) son cohetes de artillería montados en un chasis con ruedas, producidos por la empresa estadounidense Lockheed Martin. Actualmente, es el lanzador de misiles tierra-tierra más versátil y ha resultado ser clave en la guerra de Ucrania. Sus golpes precisos han conseguido a menudo desorganizar la retaguardia rusa y, gracias al bombardeo de depósitos logísticos, bases de material y municiones, Ucrania logró llevar a cabo una eficiente ofensiva en septiembre de 2022 en el óblast de Járkov y en el Donbass y expulsar a las tropas rusas de Jersón. «Han hecho un gran papel en Ucrania y podrán hacerlo también aquí», ha dicho Blaszczak.
Polonia desplegará lanzamisiles Himars a 80 kms de Kaliningrado
En la versión polaca, están equipados con munición misiles guiados GMLRS, de un alcance de 70 kilómetros, y misiles tácticos ATACMS, capaces de atacar objetivos ubicados a más de 300 kilómetros
Polonia ha estado mejorando su Ejército intensamente desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania. Blaszczak no tiene reparos en repetir que quiere convertirlo en «el Ejército más fuerte de Europa» en los dos próximos años y formula este objetivo como promesa electoral de cara a los comicios del próximo otoño. Así lo anunció en un mitin electoral en la ciudad de Wolomin el también viceprimer ministro polaco. «Si los votantes, si la gente nos da otro mandato, entonces podemos reunirnos de nuevo aquí en Wolomin en dos años y podré mostrarles que el Ejército polaco será el ejército terrestre más fuerte de Europa», arengó a los asistentes al acto.
Amigos de Kiev
El Gobierno de Varsovia, encabezado por el nacional conservador Partido Ley y Justicia (PiS), es uno de los partidarios políticos y militares más decididos de Ucrania. No solo entrega a Kiev tanques, aviones de combate y grandes cantidades de otros tipos de armamento al país vecino, sino que también equipa fuertemente a su propio Ejército en previsión de una posible extensión del conflicto, lo que ha convertido a un país periférico y problemático de la UE en un alumno aventajado de la OTAN y que juega un papel de liderazgo en la resistencia europea a la estrategia de Putin.
Ya en 2020, antes de la guerra en Ucrania, Polonia invirtió en Defensa un 4,60% de su gasto público, 13.363 millones de euros. En 2015, el año posterior a la invasión rusa de Crimea, esa inversión fue del 4,8%, 10.588 millones de euros. Mientras países como Alemania no terminan de alcanzar el requisito de la OTAN de un gasto militar mínimo del 2% del PIB de cada miembro, Polonia es el cuarto miembro de la Alianza que mejor cumple el compromiso, sólo por detrás de Grecia, EE.UU. y Lituania.
Ya en 2020, antes de la guerra en Ucrania, Polonia invirtió en Defensa un 4,60% de su gasto público, 13.363 millones de euros
El Ejército polaco, que cuenta con 123.000 soldados en activo, está recibiendo más de mil nuevos vehículos blindados de transporte de personal Borsuk y cientos de vehículos de escolta fabricados por Huta Stalowa Wola, el pedido más grande de su historia. Desde 2013 cuenta con 120 Leopard 2 alemanes. Ha triplicado hasta 96 el pedido de helicópteros Apache a la estadounidense Boeing y ha lanzado un programa de adquisición de 32 cazabombarderos F-35A , con un primer escuadrón de pilotos recibiendo ya entrenamiento en Estados Unidos.
Ha comprado 218 lanzacohetes K239 Chunmoo por 3.300 millones de euros a Corea del Sur y recibirá 24 drones de combate procedentes de Turquía. Además de sus misiles Patriot, ha permitido el despliegue de los alemanes en su territorio. Blaszczak ha anunciado también la creación de un centro logístico para lanzamisiles aliados y un centro logístico para los países que utilizan tanques Leopard. Esta vez, si Putin ataca, Polonia cuenta con medios para evitar una Guerra Relámpago.
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