Milei exige cuentas claras al Gobierno saliente en una difícil transición

Ninguno de los dos políticos realizó declaraciones a la prensa y poco trascendió de esta minicumbre para la transición, salvo que fue «amable, respetuosa e institucional», como señala un escueto comunicado de la oficina de Presidencia. Según el entono de Milei, «hablaron de la visión del Estado, de la economía en general y del panorama internacional». La devaluación del peso argentino y las diferencias con respecto a las asignaciones presupuestarias estuvieron sobre la mesa.

En la fotografía oficial aparecen sentados junto al jardín de la residencia, con gesto muy serio, una prueba más del abismo entre el peronismo saliente y la nueva filosofía ultraliberal entrante. Sus equipos se reunieron aparte para coordinar la transición hacia el nuevo gobierno, que debe asumir el 10 de diciembre. El fuego de la batalla electoral ha dejado unas brasas difíciles de apagar: el presidente electo ha exigido que la Administración de Fernández, y en especial su ministro de Economía, Sergio Massa, su rival en las elecciones, deje las cuentas claras para que los argentinos sepan a qué atenerse cuando llegue la hora de tomar decisiones drásticas.

Con esa fotografía de Fernández y Milei no solo se ha sellado el comienzo de la transición, sino de una nueva era en la historia de este país hacia un futuro imprevisible. Según informó la prensa local, luego de haber sido capturado ese momento por las cámaras, el diálogo entre ambos políticos continuó durante algunos minutos.

Si bien la mayoría de los puestos ministeriales de Milei fueron anunciados el lunes, este martes se dio a conocer un nuevo integrante del gabinete: el empresario Guillermo Ferraro, quien estará al mando del Ministerio de Infraestructura del nuevo Ejecutivo.

Como el lunes poselectoral era festivo en Argentina, el verdadero impacto del cambio de rumbo se hizo sentir ayer cuando, previendo un escenario de catástrofe económica, los supermercados del país incrementaron los precios de los productos de un día para el otro hasta casi un 50%. Otra preocupación que se siente en las calles tiene que ver con el miedo de muchos ciudadanos a perder sus puestos de trabajo, tras la ola de privatizaciones anunciada por Milei.

Según Infobae, la reunión entre Javier Milei y Alberto Fernández se terminó de concretar -tras varias idas y vueltas- en la tarde del lunes y fue acordada entre Nicolás Posse, futuro jefe de Gabinete del presidente electo, y el vicejefe de Gabinete del Gobierno saliente, Juan Manuel Olmos. Fernández y Milei habían tenido una conversación telefónica el domingo luego de darse a conocer los resultados de la segunda vuelta electoral.

Una de las principales dudas con respecto al mandato del nuevo presidente tiene que ver con la composición del Congreso, cuya aritmética no favorece a Milei, y puntualmente con la incógnita acerca de quién estará a cargo de la presidencia de la Cámara de Diputados. El Congreso cumplirá un rol clave en esta etapa nueva que se inicia en Argentina, dado que será el encargado de aprobar o frenar las iniciativas que, según anticipó Milei, serán «drásticas».

El Papa llamó este martes al vencedor de las presidenciales para felicitarle, y le aconsejó «coraje y sabiduría», según informa desde Roma Javier Martínez-Brocal. Con esta conversación de ocho minutos, Francisco consiguió que su relación no esté marcada por los insultos de Milei, sobre los que el político ya se declaró «arrepentido», y que la etapa que se abre en Argentina no derive en un continuo conflicto con la Iglesia. La iniciativa fue del Pontífice. Milei, que se dirigió a él como «Su Santidad», le respondió con buen humor que «coraje no me falta y la sabiduría la estoy trabajando».

El Papa sacó a relucir la importancia del ámbito sanitario, educativo y la lucha contra la pobreza. Milei respondió que es consciente del importante desafío que tiene por delante de combatir la indigencia, que trabajará «fuertemente» con la infancia y en ámbito educativo, y que está convencido de que los cambios que está planeando serán buenos para las personas. Además, invitó al Papa a viajar a Argentina, aunque el Pontífice no dio una respuesta directa.

En el último debate presidencial, Sergio Massa solicitó a Milei que pidiera perdón por las ofensas al Papa. «Parece que estás poco informado, porque ya había pedido perdón por eso, y lo volvería a hacer, porque si me equivoco no tengo problema en repetir que estoy arrepentido», contestó entonces. Los insultos de Milei al Papa, la mayoría previos a su entrada en política, han sido parte de su tarjeta de presentación. El primero que se recuerda es un «A vos te gusta la mierda de la justicia social» que se remonta a 2017; también le ha llamado «enemigo del bienestar, peroncho zurdo», «personaje impresentable», «nefasto». En noviembre de 2020, dijo que «habría que informar al imbécil ese que está en Roma, que defiende la justicia social, que sepa que eso es un robo y una aberración». También lo llamó «representante del Maligno en la tierra».

Por su parte, Sergio Massa reapareció este martes en las redes sociales con un poema. Pero cometió un error: en su publicación dio a entender que el autor del poema era Federico García Lorca, cuando en realidad se trataba de un autor originario del norte argentino. El texto, titulado 'La cuesta de la vida', reza: «Si un día en el camino, que venía liviano, se te vuelve oscuro y encima empinado, busca a tus amigos, tómales sus manos, apóyate en ellos para repecharlo».