El 'Kremlin de Kent', el castillo inglés en el que Rusia podría estar reclutando espías

Conocido como el 'Kremlin de Kent', se sospecha que este imponente edificio ha servido como base para las operaciones de Inteligencia de la agencia militar rusa en el Reino Unido.

Desde su construcción en 1871 por el segundo vizconde de Goschen, Seacox Heath ha sido mucho más que una simple residencia aristocrática. Su historia está impregnada de intrigas y conexiones internacionales, que se remontan a la Segunda Guerra Mundial. Se dice que el castillo fue entregado a la Unión Soviética en 1947 como un gesto de gratitud, después de que unos marineros rusos salvaran al hijo del vizconde durante el conflicto. Este acto de generosidad aparentemente inocente sentó las bases para décadas de relaciones diplomáticas, que ahora están bajo un escrutinio renovado en el contexto de la geopolítica actual y sobre todo tras la invasión de Ucrania.

Durante la Guerra Fría, Seacox Heath se convirtió en un lugar de importancia estratégica para la entonces Unión Soviética. Conocido como una dacha, o casa de campo, para funcionarios soviéticos, el castillo fue un punto de encuentro para la élite política y militar de Moscú. Se rumoreaba que había sido utilizado por diplomáticos rusos y espías como retiro de fin de semana y vacaciones durante décadas, y también era la residencia campestre del embajador ruso en la década de 1990.

Mientras que los vecinos de Hawkhurst observaban con asombro y curiosidad, Seacox Heath se convirtió así en el 'Kremlin de Kent', o 'el pequeño Kremlin', un enclave ruso en tierras inglesas que no era precisamente de su agrado.

Sin embargo, la historia de Seacox Heath tomó un giro aún más intrigante en los últimos años, cuando surgieron informes de que el castillo podría estar siendo utilizado para fines más allá de los diplomáticos. Según fuentes oficiales citadas de forma anónima por la prensa británica, la inteligencia rusa ha estado utilizando esta propiedad como base de operaciones para sus actividades de espionaje en el Reino Unido.

La decisión del Gobierno británico de retirar el estatus diplomático de Seacox Heath forma parte de un conjunto de sanciones en respuesta a presuntas acciones hostiles del Kremlin, después de que el lugar haya sido monitoreado durante años por las agencias de Inteligencia británicas. Concretamente, según detalló James Cleverly, ministro del Interior, es parte de una serie de nuevas sanciones contra Moscú que se produjeron en respuesta a un presunto ataque incendiario a un negocio vinculado a Ucrania en el este de Londres en marzo que las autoridades creen que fue orquestado por el Kremlin. No se cree que Seacox Heath se haya utilizado en la planificación del ataque, pero está entre una serie de propiedades de propiedad rusa que aún se beneficiaban del estatus diplomático.

Los residentes locales, durante mucho tiempo intrigados por las actividades sospechosas que tenían lugar detrás de los muros del castillo, recibieron la noticia con alivio. Y es que desde la invasión de Ucrania por parte de Rusia en febrero del 2022, los habitantes de los alrededores del castillo han expresado su preocupación por la presencia de drones que se cree que provienen de la finca de Seacox Heath e incluso pintaron fuera, como protesta, los colores de la bandera de Ucrania y colocaron banderas alrededor del perímetro de la propiedad.

Las sanciones lanzadas contra Rusia el miércoles incluyeron además la expulsión de Maxim Elovik, el agregado de defensa y militar de Rusia en Londres y coronel en el ejército de su país.