ajuste de cuentas
Cristina pasa a la final
Según ella, la sentencia estaba escrita desde hace años, el tribunal sentenciador era un pelotón de fusilamiento y ayer añadió que hay oscuros intereses que la quieren «presa o muerta».
Seis años de cárcel e inhabilitación de por vida para Cristina Fernández de Kirchner
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Iniciar sesiónExistían tantas dudas sobre si Cristina F. Kirchner sería condenada por la Justicia argentina como sobre el pase a la fase final del Mundial de Qatar de su selección de fútbol tras su temprana derrota ante Arabia Saudí. Finalmente, las instituciones -más o menos independientes, ... más o menos atinadas, más o menos dañadas por el populismo que campa en ese país desde hace tantos años- hicieron su trabajo y Kirchner fue ayer condenada a seis años de prisión (la fiscalía pedía 12 años) por fraude al Estado e inhabilitación perpetua para ocupar cargo público.
Sin embargo, en el mundo político argentino, todos apostaban por una condena, hasta la propia Kirchner. Los fiscales Luciani y Mola, los primeros, por supuesto. Pero, según ella, la sentencia estaba escrita desde hace años, el tribunal sentenciador era un pelotón de fusilamiento y ayer añadió que hay oscuros intereses que la quieren «presa o muerta», sobre todo después de que un desequilibrado intentara disparar contra ella.
Su estrategia de denunciar el 'lawfare' -la utilización de la Justicia para destruir a los adversarios políticos-, ha sido jaleada por la izquierda iberoamericana y por Podemos en España. Son los mismos que ensalzan las virtudes del peronismo, un movimiento político que es como el agua, según prescribía Bruce Lee: a veces adopta la forma de un caudillismo con toques fascistas como ocurrió de la mano de su fundador, Juan Domingo Perón; a veces es neoliberal, como con Carlos Menem, y a veces es puro populismo de izquierda como con el matrimonio Kirchner.
La sentencia aún no es firme, Kirchner puede apelar, pero todavía hay otras causas que podrían reabrirse contra ella y su familia. El calado político del fallo judicial es enorme: Cristina es la vicepresidenta, pero todo el mundo, incluido el presidente Alberto Fernández, sabe que ella es la líder del oficialismo. Nunca una vicepresidenta fue hallada culpable en pleno ejercicio del poder, lo que supone un paso notable para la Justicia argentina.
Para Kirchner el voto lo indulta todo y está por encima de la ley. Las reglas y las forman no importan. Su respuesta sobre si Maduro es un dictador o no, la retrata: «Aquellos que surgen de la voluntad popular nunca pueden ser definidos como dictadores».
Cristina, que es un animal político, reacciona anunciando que no será candidata en las próximas elecciones de diciembre. Ofrece así un pacto político: jubilarse a cambio de que dejen en paz a sus hijos Florencia y Máximo. Además, anhela cumplir años: el próximo 19 de febrero cumple 70 años y ya no iría a la cárcel aunque le caigan las penas del infierno.
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