Polémica escultura de Matteo Salvini en Nápoles disparando a dos inmigrantes

Al diario «Il Mattino», Scuotto ha explicado el significado de su obra, iniciada cuando Salvini era ministro del Interior: «He querido presentarlo con un niño grande que se entretiene con un videojuego poblado de fantasmas, como se ve en los detalles de la pistola que es intencionadamente desproporcionada. Con ello quiero indicar que su mensaje político es infantil, como si se tratara de una permanente Play station en la que es necesario identificar al enemigo y derribarlo». Colgando de la pistola hay un pequeño cartel con un mensaje: « Game over » (Se acabó el juego). El autor Scuotto parece evocar con esta dos palabras la frase repetida por Salvini contra algunas inmigrantes: «Se acabó el chollo”.

La escultura ha indignado al líder de la Liga. «¡Lo que uno es capaz de hacer para lograr un poco de publicidad! –comentó Salvini en Facebook-. ¡No me hace reír! La escultura que me representa mientras disparo a los inmigrantes es un auténtico asco, una instigación al odio y a la violencia, y nada tiene que ver con el arte».

Algunos miembros de la Liga, como la diputada napolitana Giuseppina Castiello, han solicitado a la galería que se retire la escultura: «Desagrada que en Nápoles, donde sus estatuas de terracota son célebres y hacen famosos en todo el mundo los belenes napolitanos, se exponga una escultura que instiga la violencia. Espero que la galería retire este monumento al odio».