Liam Fox, ni chicha ni limonada

Fox señaló en repetidas ocasiones, a lo largo de la campaña del Brexit, que el Reino Unido debe renunciar al mercado único comunitario si eso implica mantener la libertad de movimientos en suelo británico. Esta posición, más cercana a la línea dura eurófoba del partido que a la oficial, le situaba en una situación previa de candidato perdedor. La supuesta equidistancia ha sido percibida por los diputados tories, encargados de esta primera criba, como un "ni chicha ni limonada".

Sobre Liam Fox pesa además una mancha en su historial al frente de la cartera de Defensa, que tuvo que abandonar en 2011 a raíz de un pequeño escándalo. Liam Fox fue acusado de violar el código ético dentro de la Administración por su relación profesional, como ministro, con un empresario amigo.