«El avión estaba aterrizando, pero se ha desviado hacia el mar»

"El avión estaba a 50 metros del suelo, aproximándose a la pista, y en lugar de cogerla se ha desviado, ha salido de la pista y se ha ido hacia el mar", ha declarado un agente de la policía del aire y las fronteras de las islas Comores.

"El avión ha intentado un solo acercamiento y después ha desaparecido", ha añadido.

"He visto cómo se aproximaba el avión y he entrado en la terminal para buscar a mi madre, pero ahí es cuando me he dado cuenta de que el avión no había llegado". En el aeropuerto de Moroni, las lágrimas se han ido multiplicando a medida que los familiares de los pasajeros del Airbus de la compañía Yemenia siniestrado en las islas Comoras han conocido la noticia del accidente.

Familiares como Moussa Boina, que venía a buscar a su madre y a quien el ministro de Defensa, Houmed Msaidié, ha intentado consolar permaneciendo toda la noche en el aeropuerto para compartir con los familiares de las víctimas todas la información que iba llegando.

"He visto cómo se aproximaba el avión. No entiendo lo que ha ocurrido...", explicaba Boina a la agencia AFP.

En el aeropuerto de Moroni-Hahaya, muchos llegaron a recoger a sus familiares procedentes de Francia cuando conocieron la tragedia. Otros, como Assoumani Youssouf Mandura, celebran su suerte. "Soy muy afortunado porque mi esposa debía haber venido en ese avión, pero anuló el viaje en el último momento por un precio mejor en Air Madagascar", cuenta.

La noticia del accidente circuló rápidamente por la capital de las Comoras, y sobre la una de la madrugada ya se conocía en la principal isla de este archipiélago en el Índido.

Los 16 kilómetros que separan la capital, Moroni, del aeropuerto, se han llenado de coches de los familiares que llegan a preguntar por sus parientes, creando un atasco que ha durado varias horas.