Margallo cree que hay «esperanzas fundadas» para el alto el fuego en Libia

«Llamamos a todas la partes a aceptar un alto el fuego inmediato y completo y a comprometerse de forma constructiva con un diálogo político pacífico para resolvar la crisis», dice la declaración, firmada por los cinco mayores países europeos (Alemania, Francia, Reino Unido, Italia y España ), los tres vecinos de Libia (Argelia, Egipto y Túnez), Qatar, Arabia Saudí, Turquía, Emiratos Árabes Unidos y EE.UU. Los firmantes también acordaron rechazar cualquier «interferencia exterior», en alusión a los bombardeos aéreos registrados en las últimas semanas en territorio libio y que las autoridades estadounidenses han atribuido a Egipto y a Emirates Árabes Unidos.

La declaración también ratifica las conclusiones de la cumbre celebrada el pasado día 17 en Madrid, que exigía, además del alto el fuego, el reconocimiento del parlamento reunido en Tobruk, la disolución del parlamento alternativo y la formación de un Gobierno de unidad.

España estuvo representada en la reunión por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo , que defendió que hay «esperanzas fundadas para resolver el problema libio». Margallo se refirió a la importancia que Libia tiene para España «en términos de seguridad, en términos de control de la inmigración ilegal y, también, en términos de seguridad energética, en unos momentos en que se está rediseñando todo el mapa energético en Europa».

El grupo ha puesto en marcha una hoja de ruta, en la que habrá distintas reuniones entre países vecinos y autoridades libias en Nueva York y una reunión de mediación en Argel en octubre. Margallo dijo que España había ofrecido cerrar el proceso con una conferencia en Madrid.