Así es como recaliento la pizza para que quede crujiente sin usar el horno

Si quieres que la base de la pizza quede crujiente y el queso se derrita perfectamente, la mejor opción es usar una sartén. Así es como recaliento la pizza, con un método ideal porque distribuye el calor de manera uniforme y ayuda a que la masa recupere su firmeza sin resecar el queso.

Pero, ¿cómo recalentar la pizza en una sartén? El paso a paso de este truco es muy sencillo:

1- Coloca una sartén antiadherente a fuego medio y deja que se caliente durante unos segundos.

2- Pon las porciones de pizza en la sartén sin añadir aceite ni mantequilla.

3- Cocina la pizza durante 2 o 3 minutos, dejando que la base se dore ligeramente.

4- Para derretir el queso sin que la masa se queme, añade unas gotas de agua en la sartén, alejadas de la pizza, y tapa la sartén durante 1 minuto. Esto generará vapor y ayudará a que el queso quede perfecto.

5- Retira la tapa y revisa que la base esté dorada y crujiente. Si es necesario, deja la pizza unos segundos más.

Con este truco, conseguirás una pizza recalentada con una textura muy similar a la original, sin necesidad de encender el horno.

Si no puedes o no quieres usar una sartén, aquí tienes otras opciones que también pueden funcionar.

Utiliza el microondas, pero con un truco: Coloca la pizza en un plato y pon un vaso con agua dentro del microondas, junto a la pizza. Calienta a potencia media durante 30-40 segundos.

El agua evitará que la masa se reseque demasiado, aunque no quedará tan crujiente como con la sartén. Lo que está claro es que, si no pones el vaso de agua, la masa se volverá gomosa.

Este mismo electrodoméstico es perfecto para aprovechar más sobras. Puedes usarlo también para recalentar arroz con seguridad.

Pero para la pizza puedes usar además la freidora de aire. Sí. Este electrodoméstico tan cómodo y versátil, donde puedes hacer desde unas patatas fritas crujientes hasta una tarta de queso, también sirve para recalentar pizza.

Coloca los trozos de pizza sobre la rejilla o sobre un trozo de papel de horno. Así no mancharás mucho y te ahorrarás limpiar tu freidora de aire. Cocina a 180 °C durante 3 o 4 minutos. Este método es rápido y mantiene la textura crujiente sin complicaciones.

En cualquier caso, utilices el método que utilices para recalentar, guarda la pizza que te sobre en un recipiente hermético en la nevera. Así no absorberá humedad y mantendrá mejor su textura al recalentarse.

Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de tu pizza recalentada con un resultado delicioso y sin esfuerzo. ¡Pruébalo y olvídate de la pizza blanda o seca!