Alejandra Rubio acude sola a una revisión médica de su embarazo: sin Carlo Costanzia ni Terelu Campos

Algo tan normal como una revisión médica de una embarazada se convierte en una anomalía en el caso de Alejandra Rubio después de todo lo ocurrido y del ruido generado estos días: ha sido su anuncio vía exclusiva, sus fotografías fumando, la aparición de su madre, Terelu Campos, en televisión para llevarse otra exclusiva jugosas, las mil críticas de compañeros de profesión y redes… Un no parar.

Eso sí, Alejandra Rubio ha acudido a la Fundación Jiménez Díaz, de Madrid, sola a hacerse la revisión. Ni rastro de su novio, Carlo Costanzia, ni de Terelu Campos, quien parece haberse dado unos días de silencio tras su polémica aparición en '¡De viernes!'.

Parece que hayan pasado dos años, pero fue hace menos de una semana cuando la colaboradora de televisión anunció su embarazo después de apenas cinco meses de relación con el hijo de Mar Flores. Para diciembre espera su hijo, si no hay problemas indeseados.

En este tiempo ha habido lugar para todo. Terelu Campos defendió a su hija de las críticas y dijo que ve a Carlo Costanzia como una persona calmada y tranquila, aunque sin transmitir una gran efusividad en sus mensajes. Por su parte, Mar Flores, la madre del futuro padre, contó cómo se enteró de que iba a ser abuela, mientras Carmen Borrego, tía abuela, se ofreció a criar al bebé, por si al pequeño le fueran a faltar manos.

Después, Alejandra Rubio y Carlo Costanzia decidieron escaparse de todo el ruido y el barullo para disfrutar de unos días de desconexión en Formentera, donde se la vio fumando. Antes ya había aparecido con un cigarrillo en la mano, durante el funeral de su abuela, María Teresa Campos, aunque por entonces no se sabía que estaba embarazada., Este hábito, que también mantiene su madre, fue ampliamente criticado, pues ya se sabe que está ampliamente desaconsejado por los peligros para el feto y el parto.

Todo este cúmulo de sucesos copó buena parte de la actividad rosa tanto en televisión como en redes, con críticas de compañeros de profesión como Kiko Matamoros, Ana Rosa Quintana o Alessandro Lequio, entre muchos otros.

La hija de Terelu Campos escogió para su visita al centro médico un pantalón ancho en color morado y una camiseta blanca crop top que dejaba al descubierto su barriguita, aunque de momento no asoma ningún volumen notorio. En varios momentos, la joven se ha acariciado la tripita. Por si sirviera de algo.

Tan locuaz como suele ser, especialmente cuando hay exclusivas, esta vez la hija de Terelu Campos apostó por el silencio y no hizo ningún tipo de declaración a los periodistas que se acercaron a hablar con ella. Únicamente los «holas» y «gracias» de rigor.