Belinda: «Extraño que me quieran por cómo soy, no por quién soy»

Tras anular su boda con Christian Nodal, la actriz y cantante estrena ‘Bienvenidos a Edén’ en Netflix y se refugia en España para huir del acoso de la prensa mexicana

Belinda

Antonio Albert

06/05/2022
Actualizado a las 09:16h.

La anulación de su boda con el cantante Christian Nodal , que se le declaró en Barcelona con un anillo valorado en casi tres millones de euros, desencadenó un auténtico tsunami en la prensa mexicana contra Belinda (32 años), con titulares no exentos de ... crueldad. Sobre este tema, Belinda hace honor a su nombre y prefiere quedarse muda. Incluso llegaron a criticar su físico, acusándola de sufrir una delgadez extrema. En este caso, la cantante y actriz salta dolida: «No entiendo que digan esas cosas. Yo, como todo el mundo, a veces adelgazo, a veces engordo. Es normal». Y confiesa un secreto: «Mi debilidad es La pantera rosa».

Lo cierto es que le pega mucho, con su aspecto delicado, su voz dulce y una forma de ser, abierta e ingenua, que algunos comparan con Tamara Falcó.

Para huir del ruido mediático, Belinda se ha refugiado en España , encantada de reencontrarse con su tierra para presentar sus nuevos proyectos como artista y como empresaria, manteniendo a sus 15 millones de seguidores al tanto de sus novedades: «Estoy superilusionada de vivir aquí porque forma parte de mi sangre, de mis raíces».

Hoy estrena ‘Bienvenidos a Edén’ en Netflix . La serie, creada por Joaquín Górriz, se inspira en el famoso Fyre Festival que estafó a celebridades e ‘influencers’ de medio mundo, que acudieron a una fiesta en una isla y amanecieron en una pesadilla. En la ficción, Belinda es África, «una chica que al principio puede caer mal porque es un poco diva, está acostumbrada a la fama, pero no es feliz con la vida que lleva». Y en la fama es en lo único en que se parecen. Belinda espera que se confirme una segunda temporada para repetir la experiencia junto a Amaia Salamanca y Ana Mena en esta distopía sobre la felicidad.

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Como emprendedora es la creadora de Wonu , una marca especializada en productos de belleza integral, con el colágeno como estrella, que acaba de introducir en el mercado estadounidense: «Todas las mañanas me tomo mi ración».

A Belinda le proponemos un juego con los títulos de algunas de sus canciones más famosas y acepta el reto encantada:

- ‘En el amor hay que perdonar’ : «Depende. En principio, sí, pero hay que poner límites. Hay barbaridades que no se pueden perdonar».

- ‘Amor a primera vista’: «Ya no» .

- ‘Bailaría sobre el fuego’: «Una de mis canciones favoritas. Como soy Leo, me encanta el fuego. Hay que bailar siempre, pero con precaución para no quemarse».

- ‘Superstar’: «Yo no lo soy, África (su personaje en ‘Bienvenidos a Edén’), sí».

- ‘Sal de mi piel’: «Yo solo tengo un tatuaje que dice ‘La vie en rose’, por la canción». ‘La vie en rose’. Como la pantera. Al final todo cuadra.

La foto: niña de papá

Convertida desde pequeña en una estrella de la música y de las series infantiles mexicanas, nació en España, donde vivió feliz sus primeros años hasta que, por motivos laborales, su familia emprendió una nueva etapa al otro lado del océano. Aquí la vemos junto su padre durante unas vacaciones estivales: «Mi papá era, y sigue siendo, todo para mí. Es mi héroe. Pero por su forma de ser, tal vez por español, es algo menos expresivo que los mexicanos, sobre todo a la hora de demostrar el cariño. Lo amo, lo admiro».

Echando la vista atrás, Belinda recuerda su infancia: «De chiquita me recuerdo nada cohibida, aunque con la edad me he vuelto más tímida, y no me daba vergüenza cantar, bailar, actuar frente a la gente». Esa personalidad le abrió las puertas del espectáculo como auténtica niña prodigio: «Al principio lo viví como un juego, porque hacía lo que me gustaba. Pero no es un ‘hobby’, es un trabajo que exige mucho sacrificio, mucha entrega. Pero eso lo ves con el tiempo».

Pasó de la infancia a la adolescencia en los platós: «Echo de menos que la gente no te juzgue sin conocerte, que estén pendientes de lo que haces para mal, la envidia, la maldad de algunas personas... Extraño la bondad, el desinterés, que me quieran por cómo soy y no por quién soy. No me gusta ir con miedo cuando me presentan a alguien, pero ahora dudo de las intenciones de los desconocidos».

Belinda hace bandera de la bondad, siendo una ferviente defensora de causas a las que se ha dedicado con la música, desde la lucha contra el cáncer a la recaudación de fondos para los afectados por los terremotos en Chile o Haití: «En realidad lo hago por mí, porque estas acciones me llenan de amor, me llenan el corazón».