Este es el decálogo de promesas electorales de los políticos que afecta a las familias

Sólo tres partidos (PP, Ciudadanos y Podemos) muestran un capítulo dedicado a esta institución, con medidas que resultan, más bien, una declaración de intenciones. «Por primera vez se empieza a hablar de la familia y la maternidad en una campaña electoral, pero no es por indicación de los partidos, sino que responde a una sensibilidad especial de algunos candidatos populares, que no veo en otros candidatos. Se hacen propuestas territoriales y aisladas», considera Benigno Blanco, presidente del Foro de la Familia.

Por ejemplo, la candidata del PP en Pozuelo de Alarcón (Madrid) ha anunciado la aprobación de un cheque bebé de 2.000 euros por el nacimiento de un hijo; en Zaragoza, el candidato popular, entre otras medidas, implantará que un día cada trimestre las familias puedan utilizar gratis servicios y equipamientos culturales; Aragón aprobó la Ley de la Familia y Luisa Fernanda Rudí (PP) quiere desarrollarla en la siguiente legislatura con ayudas fiscales y subvenciones por nacimiento de hijos; en Castilla y León, el candidato del PP propone una Ley de Conciliación Familiar para ayudar a los hogares con hijos más pequeños...

«Cada vez la familia tiene más presencia en las campañas —sostiene Raúl Sánchez, director de la Federación Española de Familias Numerosas (FEFN)—. Pero falta valentía para llevar a la práctica las políticas de familia, porque son caras y dan resultado a medio y largo plazo, no tienen una rentabilidad inmediata. España tiene un problema con la familia como lo tiene en educación. Hace falta un consenso y dotar de estabilidad a las políticas integrales familiares para que perduren en el tiempo».

Pero no todas las organizaciones lo perciben de la misma manera. Para la directora general de The Family Watch, María José Olesti, «la familia está dentro de la agenda política y presente en muchos programas electorales, incluso en algunos con un capítulo propio. La mayoría de las formaciones reconoce el papel fundamental de la familia como elemento de cohesión social en la crisis».

Así lo hace el PP que, en el documento que rige su política autonómica, valora a la familia como «la institución más importante de nuestra sociedad». Poco más se extiende en este apartado que cuenta con tan sólo diez medidas para favorecer a la familia en el ámbito autonómico y municipal. Propuestas dirigidas a promover la racionalización de horarios; a fomentar la conciliación; a desarrollar políticas de apoyo a la maternidad... Y poco más.

Eso sí el programa recuerda las medidas aprobadas a nivel nacional. «Los Gobiernos del PP están desplegando una amplia política familiar», afirma, y fiel reflejo de ello es el recién aprobado Plan Integral de Apoyo a la Familia, con 225 medidas sobre educación, empleo, conciliación, de protección a la maternidad... La más novedosa fue anunciada la pasada semana por el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso: las madres con dos hijos y más que se jubilen a partir de 2016 verán aumentada su pensión.

Ni un solo capítulo ni apartado reservan los socialistas a la familia en su programa marco autonómico y municipal, aunque sí realizan propuestas aisladas. Por ejemplo, cabe destacar que, en las localidades que gobiernen, desarrollarán un Plan de Apoyo a las Familias Monoparentales y crearán grupos de apoyo que busquen alternativas a las familias afectadas por desahucios.

En los programas marco de IU y UPyD, la familia no tiene entidad suficiente como otros colectivos que sí cuenta con sus propios apartados y medidas.Por ejemplo, infancia, juventud, educación y sanidad.

Ciudadanos sí recoge en su programa un epígrafe para «Apoyar a la familia», donde reúne algunas propuesta más concretas: «Nuestro objetivo es aumentar las cuantías de las prestaciones de la Seguridad Social por hijo a cargo, especialmente en el caso de familias numerosas, monoparentales o con hijos discapacitados», tres colectivos que figuran entre las prioridades de este partido. También propone introducir un tratamiento fiscal más favorable para las familias y promover la conciliación.

Podemos también lleva en su programa seis propuestas para las familias, pero no se centra en una política integral. Habla de promover la libertad para decidir sobre la medicalización del embarazo y parto; de garantizar el acceso a la reproducción asistida desde el sistema público de salud; de favorecer la flexibilidad horaria en el trabajo y hacer más largos los permisos por cuidado de hijos; de racionalizar horarios, y de dar atención especial a las madres jóvenes para que puedan seguir estudiando una vez que tienen un hijo.

La familia también ha sido olvidada en la política regional, concluye un reciente informe del Instituto de Política Familiar (IPF) que ha hecho balance del tratamiento recibido por las familias por parte de la autonomías en los últimos cuatro años. Según el presidente esta entidad, Eduardo Hertfelder, «lo más preocupante es que la previsión para la próxima legislatura sea igual. Se constatan que no hay voluntad política de apoyar a la familia».