Bustamante habla claro: «Mostraré lo que yo valgo»

Aprovechando que es festivo en la Comunidad de Madrid, David ha regresado a la casa que compartía con Paula y su hija, para pasar la tarde al lado de Daniella (8), sin embargo pisar la que fue su residencia familiar ha conseguido poner a David sentimental y que mande un mensaje tanto a seguidores como detractores.

«Y por mucho que me soplen y por mucho que me resten, sigo en pié, soldado intacto, aunque a muchos les moleste... Miro al frente, pues los lados, me distraen de mi oponente, y no quiero que tú sientas que mi ser es prepotente, es tan solo que me obligan a pegar un paso al frente... Mostraré lo que yo valgo, y no hay nada más valiente, que deciros a la cara.. . No me importa lo que pienses», expresaba el cantante junto a una imagen donde se le ve sentado en el jardín de su casa.

Un claro mensaje, tanto para los que han cargado contra el cantante durante las últimas semanas, como para sus seguidores. Incluso podría entenderse como una indirecta a la madre de su hija, Paula Echevarría, a la que aseguran desde su entorno cercano que el artista estaría intentando conquistar de nuevo.

Sin duda una absoluta declaración de intenciones que demuestran que David estaría fuerte y con energía suficiente tanto para afrontar nuevos frentes, como para limpiar su imagen.

La instantánea ha conseguido en cuestión de horas casi 35.000 «Me gusta», entre los que se encuentra el de Paula Echevarría, y más de 1.300 comentarios.

Cabe resaltar que desde que volviera a las redes sociales, tras más de dos largas semanas en silencio, el artista no ha dejado de mandar mensajes subliminales en sus imágenes compartidas en Instagram. Por el momento n o hay una reconciliación evidente , ni se les ha vuelto a ver juntos desde que saltara la noticia de su separación. Pero lo cierto es que hay cosas que sí han cambiado, David ya no se calla y veremos si este fin de semana en la comunión de su hija consiguen acercar posturas y dejarse ver juntos y felices como todos estos años o por el contrario, alejarse para siempre.