La belleza toma el poder

El concurso de belleza ha anunciado que Regina Hopper y Marjorie Vincent-Tripp ocuparán los cargos más importantes de la organización. Ambas conocen los entresijos de este mundo, ya que se subieron a sus tacones y se enfundaron trajes de noche como concursantes. Hopper fue Miss Arkansas 1983, es abogada y tiene experiencia tanto en gestión -es ex consejera delegada de Intelligent Transportation Society of America y de America’s Natural Gas Alliance- como en comunicación, donde fue periodista para CBS y ganó un premio « Emmy » por sus trabajos de investigación. Ahora será consejera delegada de Miss America Organization , en sustitución de Sam Haskell, protagonista del escándalo de los correos electrónicos, y de Josh Randle, que también dimitió cuando se conoció su contenido.

Vincent-Tripp, por su parte, se convirtió en 1991 en la cuarta mujer negra en conquistar el título de Miss America. Cambió las pasarelas por el derecho y en la actualidad es un alto cargo de la fiscalía del estado de Florida. Asume el puesto de presidente del consejo de administración de la Fundación Miss America, donde sustituirá a Lynn Griffith.

Su nombramiento se une al de Gretchen Carlson , también ganadora del concurso, en su edición de 1989, que en enero se convirtió en la presidenta del consejo de administración de Miss America Organization. Tras su triunfo, se graduó en Stanford y se convirtió en una de las estrellas de Fox. En 2016, denunció por acoso sexual al capo de su cadena, Roger Ailes, y provocó una oleada de otras denuncias que acabaron con el ejecutivo en la calle.

«El nombramiento de este equipo de liderazgo formado por mujeres es una muestra de los cambios en toda nuestra organización y en sus actividades, que dan paso a una nueva era de progresismo, inclusión y empoderamiento», aseguraron en un comunicado conjunto Miss America Organization y la Fundación Miss America.

La razón de los cambios fueron los correos electrónicos que «The Huffington Post» desveló. Haskell criticó a una ex concursante por su peso y vida sexual e hizo comentarios denigrantes sobre otras en mensajes compartidos con otros ejecutivos, como Randle.

Con el vuelco radical en su cúpula directiva, habrá que ver qué camino toma ahora Miss America. La caída de la audiencia en los últimos años y los movimientos feministas como « MeToo » son un desafío ante el que las tres nuevas ejecutivas tienen que luchar.