Nieves Álvarez: «Sólo deseo un verano tranquilo y fuera de los focos»

La última semana ha sido especialmente difícil para la modelo madrileña. La mañana del martes 7 de julio confirmaba, a través de un comunicado, lo que ya era un secreto a voces: su divorcio de mutuo acuerdo con el fotógrafo italiano Marco Severini , con quien se casó en 2002. Casi al mismo tiempo, en París, se fotografiaba con su buen amigo Stephane Rolland , antes de que comenzara el desfile del diseñador francés en la Semana de la Alta Costura . Por la noche, compartía copa, canapé y confidencias con Naty Abascal en la fiesta de Bulgari. Al tiempo, sus hijos (Adriano, de 10 años, y los mellizos Brando y Bianca, de 8) regresaban a casa después de unos días de campamento. Tras pensárselo un momento, Nieves concluye: «Éste será un verano con unas circunstancias diferentes» .

Al anunciar la ruptura, y aclarar que entre ambos «queda una relación de máximo respeto y amor» , Nieves Álvarez y Marco Severini confirman que están de acuerdo en que sus hijos noten lo menos posible los cambios que se van a producir en sus vidas. Eso explica que el fotógrafo se haya instalado en otro piso dentro del mismo edificio en el que figura el domicilio familiar , con el fin de que Adriano, Brando y Bianca puedan estar en las dos casas sin demasiado trastorno. «Tenemos la intención de viajar todos juntos algunos días , porque la relación que Marco y yo mantenemos es muy cordial, y queremos lo mejor para nuestros hijos», aclara la modelo.

«Veo tan lejos mis días de descanso, que aún no tengo nada claro el destino . En cualquier caso, soy de las que organiza todo en el último minuto, porque con mi trabajo nunca se sabe lo que podrá cambiar la agenda». Nieves Álvarez evoca con nostalgia cómo fueron sus pasados veranos. «En 2014 estuvimos en Pulla (Italia) y me encantó. El año anterior viajamos por el norte de España y Portugal, así, a la aventura, que es lo que más me gusta . Hace tiempo tuvimos una casa en Ibiza , pero la vendimos porque me cansé de no poder desconectar del todo. Además no era un buen plan para los niños. En verano me gusta disfrutar de la familia, estar sin teléfono, sin agenda, sin maquillaje, sin tacones... Tan solo con mis seres queridos y muy tranquila» , señala.

Lo que sí tiene claro es que quiere vacacionar fuera de España: «Necesito salir y relajarme mentalmente. Y lo que espero es estar muy alejada de los focos. En serio, sólo busco paz y poder disfrutar de unos días de calma con mis niños» , comenta.

Precisamente por esa necesidad de sosiego, la modelo intenta ignorar lo que se escribe y se dice sobre su ruptura matrimonial . Sin embargo, aún no ha levantado una barrera lo suficientemente alta como para que no le lleguen ciertos rumores que le duelen y que, intuye, parecen tener muy mala intención.

Tal y como repite a sus amigos, «no hay terceras personas» en la decisión de divorciarse, y sí un desgaste paulatino que en los últimos años ha ido a más. El cariño y la amistad que comparte con Severini no han sido suficientes.