Elecciones 23J
Sumar pierde siete escaños pero da por garantizado el gobierno con el PSOE
Entusiasmo en la coalición porque salvan los muebles tras el desastre del 28M
Feijóo gana pero Sánchez puede gobernar con Puigdemont
La última hora tras el 23J
Las expectativas ayer en el cuartel de Sumar no eran buenas. Por eso a pesar de que no lograron la tercera posición y de que pierden siete escaños con respecto a la suma de la izquierda alternativa al PSOEde 2019, la organización recibió a la ... vicepresidenta segunda del Gobierno en funciones y candidata al 23J, Yolanda Díaz, con aplausos muy fuertes y vítores. Frenesí: dan por garantizada la reedición del gobierno con el PSOE. Sumar logró 31 escaños y un 12,28 por ciento del censo electoral (2.917.323 votos).
Díaz más que satisfecha porque creó la coalición en tiempo récord y tras una negociación con Podemos muy conflictiva. «Sumar tiene muy poco tiempo de vida, creo que hemos hecho lo imposible, le quiero dar las gracias a todas las personas que desde el inicio han confiado en Sumar, a todas las que formaron parte del equipo de coordinación, a todos los miles y miles de voluntarios que se extendieron como una enorme malla a lo largo del país, gracias de corazón», dijo Díaz al conocerse los resultados definitivos, emocionada y con un hilo de voz.
Estaba acompañada de la líder de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, el de Consumo y líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, la de Más Madrid, Mónica García, y otras personalidades de los comunes y Compromís, además de los portavoces de campaña como Ernest Urtasun. Todos con cara de satisfacción.
Cuando Díaz entró al edificio, los presentes la recibieron al grito de «presidenta, presidenta». Pero hasta para volver a colgarse el prefijo de 'vice' queda por delante una negociación tortuosa, porque la posibilidad de que la izquierda vuelva a gobernar está hoy en manos de Junts y las exigencias del fugado Carles Puigdemont, su líder.
En Sumar confían en que esa negociación con Junts salga adelante para seguir gobernando. «Desde mañana mismo me pongo a negociar con todas las fuerzas progresistas y democráticas del país para garantizar el gobierno en España, desde mañana», aseguró la candidata de Sumar. «Desde mañana mismo vamos a seguir trabajando por nuestro país, por nuestra gente y para tener un país mejor», continuó.
El caso es que en Larra 19, la sede nacional de Sumar, había un innegable entusiasmo, caras de alegría que desbordaban. En Larra 19 daba igual el tercer puesto, daba igual que en comparación con 2019 la izquierda alternativa al PSOE haya perdido 700.000 votos. Porque la vicepresidenta salió al final de la noche a saludar a más de 200 personas que celebraron haber frenado el auge del PPy Vox.
La sensación entre los candidatos y los equipos de Sumar era que Yolanda Díaz había logrado «salvar los muebles» después de que la marca Unidas Podemos se hundiera en las elecciones autonómicas y municipales del 28M. Hace dos meses que este espacio se presentó a las urnas agotado y sufrió la mayor debacle desde que Podemos se creó en 2014. Unidas Podemos perdió cinco gobiernos autonómicos el 28M y desapareció de parlamentos autonómicos donde todavía tenían representación. De 47 escaños autonómicos que tenían antes del 28M, quedaron reducidos a quince. Y lo más doloroso: Podemos desapareció de la Comunidad de Madrid y del ayuntamiento y de la Comunidad Valenciana y del consistorio de Valencia.
El espacio pierde votos
Ahora, Podemos está dentro de Sumar. Díaz configuró la marca en un tiempo récord y negoció una coalición donde hoy se integran 15 partidos. El objetivo era «ensanchar la base» y «no estar en una esquinita del tablero». Aunque los 31 escaños de Sumar sirven para mantener al espacio con vida y empezar a construir desde ahí, lo cierto es que no mejoran los resultados de Unidas Podemos en 2019.
Pablo Iglesias logró 35 escaños y el 12,97 por ciento (3.119.364 votos) en las anteriores elecciones. Que ya de por sí son mejores resultados. Pero es que además Iglesias no llevaba a Más País y Compromís integrados, Díaz sí. Unidas Podemos junto a Más País y Compromís logró en 2019 38 diputados y el 15,3 por ciento del censo electoral (3.678.474 votos). Sumar consiguió ayer siete escaños y tres décimas menos.
Alegría por frenar a PP y Vox
La izquierda celebró ayer que el bloque tiene posibilidades de gobernar con otro pacto con ERC y Bildu y una abstención de Junts. «Les hemos dicho en esta campaña que había gente preocupada en el país, y hoy creo que la gente va a dormir más tranquila. La democracia hoy ha ganado y la democracia hoy sale fortalecida, hemos ganado. Dijimos que empezaron la campaña con un guion que decía que iban a ganar las elecciones y el guión ha cambiado, hemos hecho posible cambiar la vida de la gente, el guión hoy lo han escrito democráticamente los españoles y las españolas», expresó Díaz.
La campaña de Sumar ha estado muy orientada en reactivar al electorado de izquierdas y absorber al votante descontento de PSOE y Unidas Podemos. De hecho, durante la primera semana había un interés especial en cubrir el vacío mediático que Sánchez estaba dejando, sin apenas actos, y que en Sumar encendió las alertas por si eso podía perjudicar al bloque de la izquierda. Tras el debate a tres, el PSOE se creció, dejando situaciones tan peregrinas como la del exalcalde socialista de Valladolid Óscar Puente pidiendo el voto para Sumar en circunscripciones grandes.
La épica y el tono del mensaje de Sumar cambió a partir del debate del miércoles, donde la vicepresidenta se midió contra el líder de Vox, Santiago Abascal, y el presidente Sánchez. Ante un Sánchez más contenido después de sus errores de comunicación en el cara a cara contra el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, la candidata de Sumar destacó por encima de Sánchez al confrontar a la derecha.