Sánchez consuma unas listas que hacen estallar a los barones y relegan a los perfiles feministas

Una de las lecturas más evidentes es que la ubicación en los principales puestos a los ministros y altos cargos del Gobierno, en un contexto que se espera que sea de retroceso, va a dejar fuera del parlamento a figuras jóvenes y que alguno de los casos han abanderado el discurso feminista del partido. De esto último el caso más llamativo es el de Laura Berja, portavoz de Igualdad del PSOE en el Congreso de los Diputados y diputada por Jaén. Por esa provincia no ha encontrado tampoco acomodo el exportavoz de la Ejecutiva, Felipe Sicilia, que confirma una caída política abrupta en apenas dos años.

También queda fuera la presidenta de la comisión parlamentaria contra la violencia de género, Beatriz Micaela Carrillo, que no repetirá por Sevilla. Por otro lado, no tiene garantizado volver al Congreso la secretaria de Igualdad de Ferraz, Andrea Fernández, a la que se ha situado como número dos por León. Desde el enfoque feminista contrasta que se haya salvado, contra el criterio de algunos pesos pesados del partido, a la exvicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo. Será la número uno por Granada. Su incorporación motivó que el comité provincial discurriese en un ambiente muy tenso, refieren fuentes provinciales. En la comisión federal de listas se expresó ayer la queja formal por el mal lugar en el que quedaban algunos de los rostros feministas más destacados del partido.

En el PSOE justifican todos esos casos por distintas cuestiones. A Fernández la acusan de haber intentado imponerse al líder provincial, Alfonso Cendón, que se mantiene de número uno en la provincia, pese a que Fernández gozaba de un respaldo y reconocimiento importante en las bases. No situar en posiciones de salida en el Congreso de los Diputados a tu rostro joven más emblemático envía un mensaje «perturbador», en palabras de un miembro de la actual Ejecutiva Federal. En el caso de Berja y Sicilia en Ferraz justifican que no tenían el apoyo provincial. Pero el no respaldo provincial no es obstáculo para que Ferraz decida incluir a un candidato. Fuentes de la dirección del PSOE andaluz critican que la exclusión de ambos es «difícilmente entendible».

En todos estos movimientos se establece una conexión con Adriana Lastra. Aunque algunas fuentes apuntan a que las relaciones con la antigua número dos se han recompuesto, lo cierto es que cuando el presidente de Asturias, Adrián Barbón, anunciaba hace nueve meses que Lastra encabezaría la candidatura por Asturias no sentaron bien en Ferraz. Se entendían como un movimiento extemporáneo y un pulso. Vetar a Lastra no parecía un movimiento factible. Pero algunas de las figuras citadas y de las que se prescinde o que tienen muy difícil conseguir el acta tenían una conexión política fuerte con la antigua vicesecretaria general del PSOE.

«Nadie entiende nada», asegura uno de los diputados ahora señalados y que representaban el futuro del partido. El actual secretario general de Juventudes Socialistas de España, Víctor Camino, va a ocupar el puesto número 6 en la lista por Valencia, sin opciones de lograr escaño. Tampoco repetirá otro joven, su antecesor en el puesto, Omar Anguita, pese a que su nombre figuraba en la lista que emanaba de las agrupaciones locales. Queda totalmente relegada de las listas por Orense Uxía Tizón.

La exclusión total de Anguita en la lista por Madrid contrasta con una candidatura plagada de perfiles muy veteranos y que acumulan años como cargos públicos. Es el caso de Cristina Narbona o Rafael Simancas, además de servir como pista de aterrizaje para Margarita Robles, Teresa Ribera, José Manuel Albares u Óscar López. La lista por Madrid, con la polémica entrada de la directora de la Guardia Civil, Mercedes González, incluida, ha generado mucho malestar. «Es una vuelta al pasado», denuncian en el PSOE de Madrid.

Las tensiones se reproducen por todo el país. En Aragón existe una enorme polémica porque el todavía presidente, Javier Lambán, no quería a la ministra Pilar Alegría encabezando la lista por Zaragoza. Además ha situado de número dos a Susana Sumelzo. Lambán también tuvo que renunciar a que Ignacio Urquizu liderase la lista por Teruel. Esa situación ha llevado esta misma tarde a la Comisión Regional del PSOE aragonés a manifestar su «profunda disconformidad con la decisión de la comisión federal de listas» en relación a las candidaturas por las provincias de Zaragoza y Teruel, tanto para el Congreso como para el Senado.

El PSOE de Aragón tuvo que emitir un comunicado en la noche del viernes explicando su rechazo a la intervención de Ferraz. Y anticipan que tendrá consecuencias en el desarrollo de la campaña electoral. «Lamentamos profundamente esta decisión que va a producir, con toda seguridad, un profundo desánimo entre los militantes a pocas semanas de las elecciones», trasladan desde la federación de Javier Lambán.

Los socialistas aragoneses comunicaron que los cargos relegados a posiciones inferiores renunciaban a ir en ninguno de los puestos: «Los miembros de las candidaturas al Congreso Noemí Villagrasa, José Antonio Remón, Ángeles Malo, Abraham Martínez, Ángeles Pérez, Manuel Morte, Virtudes Borque y Adrián Gimeno, y al Senado Ana Isabel Villar, Oscar Galeano, Mar Bruna, María Pilar Capdevila, José Ignacio Andrés, Eugenio Torrubia y Raquel Naranjo renuncian a formar parte de las candidaturas por no compartir los criterios seguidos. No se descartan más renuncias en las próximas horas», advierten.

En Castilla-La Mancha se desató uno de los mayores focos de tensión, con el intento de Ferraz, finalmente infructuoso, de relegar a Sergio Gutiérrez de la primera posición para colocar en su lugar a Milagros Tolón, que va a dejar de ser alcaldesa de Toledo. El pulso de Emiliano García-Page logró revertir el intento. Pero la cuestión solo se encauzó cuando el presidente de Castilla-La Mancha, reforzado tras el 28M con su mayoría absoluta, alzo la voz para denunciar la intervención federal. Desde Toledo se dejó sentir una advertencia: «Hay mucho malestar. Están cambiando la lista mediante imposiciones y por lo que muchos interpretamos como caprichos personales. El Comité mañana no va a ser lo pacífico que debería ser».

Page empezó a moverse a media tarde para resolver esa intervención que pretendía privilegiar a una Tolón que se había quedado fuera de la lista. Pero el barón toledano no frenó el contrapulso. Las listas habían sido por unanimidad en el comité provincial con más de 300 asistentes de la provincia de Toledo que representaban al 90% de las agrupaciones locales. Finalmente Ferraz cedió y mantuvo a Gutiérrez en la primera posición y a Tolón de número dos. Tras torcer el brazo a Ferraz, Page expuso su victoria a la vez que bajaba un punto la crítica: «Agradezco el diálogo cordial con la dirección federal del PSOE para aclarar un error en el cabeza de lista de la candidatura por Toledo, y que nos permite centrarnos en la campaña y hablar de lo que realmente interesa».

En la Comunidad Valenciana la intervención de Ferraz sirvió para reforzar la posición de Carlos Fernández Bielsa, alcalde de Mislata. Después de que Ximo Puig situase en el tercer puesto al Congreso a Carmen Martínez en contra del criterio del provincial, que proponía a Pilar Sarrión. Puig también situaba en el Senado a Alfred Boix, uno de sus principales colaboradores, en lugar del alcalde de Paterna, Juan Antonio Sagredo. Pero durante la reunión de hoy Ferraz ha dado la vuelta a los cambios hechos por Puig, dando la razón al planteamiento inicial de Bielsa.

En el entorno de Puig aseguran que el todavía presidente de la Generalitat, que ha manifestado que va a seguir al frente del partido en la Comunidad Valenciana, está muy molesto con lo que está sucediendo. En su dirección regional se habla de «bochorno» por lo que interpretan como «una desautorización» al líder de la federación.

El fuego se extendió a lo largo de la tarde por otros territorios. En Castilla y León, federación que Sánchez siempre ha tenido más domesticada, también se produjeron hechos notables. Además del citado caso en León con Andrea Fernández hubo al menos otros dos focos. En la provincia de Valladolid, con el todavía alcalde Óscar Puente encabezando la lista al Congreso y al frente del aparato provincial, se había propuesto a Sara Galván como cabeza de lista al Senado. Ferraz impuso la modificación para que el candidato fuese Javier Izquierdo, secretario de Acción Electoral en la Ejecutiva Federal. Uno de los hombres fuerte del aparato. Y el movimiento se efectuó con el expreso rechazo de Puente y del líder regional, Luis Tudanca.

Al líder de Castilla y León se le reprodujeron los pulsos. En Ávila, la dirección provincial había sacado de las listas a Manuel Arribas, uno de los diputados que se reconocieron como integrantes en las cenas del Tito Berni. Pero para sorpresa de la dirección provincial Ferraz decidió reponerlo en la sesión de la comisión federal de listas. La sorpresa es menor si se tiene en cuenta que Arribas es una persona cercana al aparato de Organización de Ferraz. Pero la maniobra tuvo una consecuencia: Yolanda Vázquez, que lideraba la lista, y el resto de integrantes de la candidatura al Congreso presentaban su renuncia.