El progresista Rafael Mozo, elegido nuevo presidente del CGPJ en sustitución de Carlos Lesmes

Los vocales tumban así el Informe que encargó el presidente antes de marcharse y que había caído como un jarro de agua fría en el seno del órgano al interpretar que no era tarea suya, sino de los Vocales, elegir quien debía ser su sucesor.

Ese informe sostenía que la presidencia del Supremo y del CGPJ debía recaer en la misma persona, el presidente de Sala más antiguo del Supremo, Francisco Marín Castán, y que no era posible una bicefalia en la que Marín Castán presidiera el Supremo y el vocal mayor del Consejo, en ese caso Mozo, el CGPJ.

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Nati Villanueva

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El acuerdo del Pleno, que alude, como adelantó ABC, al informe del Gabinete Técnico que hace apenas tres años mantuvo la bicefalia en las presidencias como opción, deja prácticamente vacía la nueva responsabilidad de Mozo,, pues en realidad no ejercerá las funciones de presidente en las mismas condiciones que lo ha hecho Lesmes, sino como una sustitución por enfermedad, ausencia o viaje del presidente.

"El acuerdo que se adopta no se dirige a realizar ningún nombramiento del presidente del TS y del CGPJ sino sólo a determinar una mera suplencia: quién ejerce de manera temporal y provisional las funciones correspondientes al titular de un órgano ante la ausencia o inexistencia de ese titular", señala el informe en el que se basa el texto aprobado.

Entre las cuestiones consensuadas por los vocales está la de que todas las comisiones del CGPJ (igualdad, exteriores o la permanente) mantengan su composición actual, al igual que que todo el personal eventual del órgano continúe en sus puestos. También que el «presidente», al que llaman suplente (pues el Pleno no tiene potestad para hacer el nombramiento) ejerza sus funciones de la mano de todos los Vocales facilitando «el diálogo y el consenso» hasta que se produzca la renovación del órgano.

El Pleno ha aprobado también este jueves una declaración unánime en la que resaltan la labor de Lesmes, su «sentido institucional», su «vocación de servidor público» y su «labor en aras del correcto funcionamiento del Poder Judicial».

Los vocales mandan un mensaje tranquilizador a la Carrera judicial y a los ciudadanos: «Los órganos del CGPJ seguirán funcionando con plena normalidad y cumpliendo su función constitucional de defensa de la independencia judicial».

Emplazan además a las Cortes para que "sin más dilación, procedan a cumplir su cometido y determinen la nueva composición del CGPJ".