La presidenta de RTVE colocada por Moncloa presume de su elección entre las acusaciones de enchufe y asalto

Desde los grupos de la oposición, Elena Sánchez ha escuchado gruesos descalificativos contra esa treta de la que ella ha sido parte protagonista. El PP la considera moralmente incapacitada para ejercer el mando ejecutivo de RTVE y le reprochan que ha sido colocada para convertir «la que debería ser la televisión de todos en la televisión del Gobierno». Cs le ha dicho que «ha accedido al cargo de la forma más original ocurrida hasta la fecha, si antes era el dedazo y el decretazo, ahora ha sido el asalto, cambiando los estatutos de RTVE para incumplir la ley del ente público; bochornoso; usted está ilegitimada».

Y desde Vox calificaron la comparecencia parlamentaria de Elena Sánchez como «farsa», porque «quien va a dirigir RTVE en los próximos meses es el presidente del Gobierno, así que voy a referirme a usted como señor Sánchez». «Usted ha sido elegida por el Gobierno saltándose la ley, para garantizar la agitación y propaganda a favor del Gobierno».

Noticia Relacionada

Los letrados del Congreso ven ilegal la treta del Gobierno para tomar el poder de RTVE

Roberto Pérez

Un informe jurídico de 2011 advirtió que no vale cambiar los estatutos del ente público para dar poder ejecutivo a una presidencia interina

Desde el PSOE, ante las andanadas de la oposición, la diputada Tamara Raya se animó echarle una mano a la elegida por Moncloa para gobernar RTVE y, sutilmente, le insinuó que no entrara en ese espinoso debate, que se limitara a hablar de presupuestos. Pero Elena Sánchez no se resistió y, aunque brevemente y de forma muy superficial, defendió la legitimidad de su nombramiento, pese a que se ha llevado a cabo con una treta jurídica considerada ilegal por los letrados del Congreso, que ya advirtieron en un informe de 2011 que no se pueden modificar los estatutos de RTVE para cambiar, saltarse o enmendar la ley del ente público, que es la que establece que las competencias ejecutivas al frente de RTVE no las puede desempeñar un presidente interino elegido por el consejo de administración de la empresa sino por el Congreso de los Diputados, y por mayoría cualificada de dos tercios de la Cámara.

Pero Elena Sánchez incluso ha llegado a contradecir ese informe de los letrados del Congreso. No se ha atrevido a negar lo que dice, pero lo ha pretendido poner en entredicho afirmando que ese dictamen fue en respuesta a una pregunta distinta al caso que se ha dado ahora. Ha evitado entrar más a fondo en el asunto. Pero, con cierto tufo de victimismo, se ha dirigido a quienes la han criticado para pedirles que no la conviertan en el punto de mira de sus críticas.

La escandalosa maniobra ejecutada por Moncloa para tomar el poder de RTVE en plena carrera electoral ha tenido como protagonista a Elena Sánchez, al haber sido la elegida para ese mando en plaza tutelado por el Gobierno. Sin embargo, ella se ha presentado este miércoles en el Congreso como alguien supuestamente ajena a esta operación, por lo que ha deseado que «en la medida de lo posible no fuera yo el objeto de las contiendas políticas».

Con la independencia del ente público en total entredicho tras el asalto ejecutado por el Gobierno y las gruesas dudas de ilegalidad que rodean al caso, Elena Sánchez ha defendido que RTVE «garantiza información veraz, rigurosa e independiente».