Hazte premium Hazte premium

Indignación por una pancarta de McDonald’s que instaba a los empleados a no atender a los gitanos

«Si se ponen agresivos, amenazad con llamar a la Ertzaintza», señalaba la nota colocada en un establecimiento vasco

Adrián Mateos

Esta funcionalidad es sólo para registrados

«¡Importante! No se atiende a gitanos/rumanos». Así de tajante se mostró un trabajador de un local vasco de McDonald’s ante los supuestos «fraudes» cometidos por integrantes de dichos colectivos a la hora de pagar. El implicado colgó un cartel en los vestuarios del establecimiento para disuadir a sus compañeros de servir comida o bebida a los gitanos , a los que, según se podía leer en el anuncio, se les debía de decir que no tenían cambio: «Si se ponen agresivos, amenazad con llamar a la Ertzaintza, y si lo creéis conveniente, llamad», rezaba la nota, que ha generado indignación en el Parlamento vasco.

El caso fue llevado a la Cámara autonómica por Izquierda Unida después de que el cartel circulara un tiempo por las redes sociales. De la mano de su portavoz, Marina Albiol , la formación instó también a la Comisión Europea a iniciar una investigación para comprobar si la multinacional ha pedido a sus trabajadores que no atienda a los gitanos ni a los rumanos en el conjunto de la Unión.

De hecho, la propia legislación española prohíbe estrictamente este tipo de medidas. Tal y como refleja el BOE en la Ley 10/2015 de Espectáculos Públicos , «en ningún caso» se puede discriminar a un cliente «por razón de origen o lugar de nacimientos, raza, sexo, religión, opinión, discapacidad, orientación sexual, identidad de género o cualquier otra condición o circunstancia personal o social de los usuarios ».

Por su parte, McDonald’s España ha mostrado su «rechazo y condena tajante» al cartel. En declaraciones a El Correo, la compañía ha manifestado que se trata de una decisión «personal» de un trabajador que no obedece ninguna instrucción de la empresa.

Timos

En el cartel, los trabajadores del local vasco advirtieron de varios trucos que utilizan supuestamente los gitanos y los rumanos para engañar a los cajeros. Entre ellos aparece el timo del billete falso, que consiste en pagar con un billete de gran valor (50 o 100 euros) un pedido pequeño , como dos botellas de agua: «El cajero lo validará personalmente o a través de la máquina de detección», sostiene la nota, que añade que el estafador le dirá nada más recibir la devolución que finalmente va a pagar con un billete más pequeño.

Una vez el cliente haya recuperado el billete bueno, «hará como que busca otro billete y dirá al cajero que finalmente va a pagar con el billete inicial», el cual sustituirá por uno falso sin que el trabajador se dé cuenta, y, confiado en que le va a entregar el mismo de antes, esta vez no lo validará.

Otro timo común, según la nota, consiste en acudir al trabajador «con menor destreza» y entregarle un billete alto para pagar de nuevo algo de poco valor como un café. Tras recibir el cambio, el cliente finge encontrar un euro en el suelo y pide al cajero que le devuelva su dinero inicial (50 euros). «Sin que el empleado se dé cuenta, le ha entregado los 50 euros junto con el cambio de 49 euros», sostiene la pancarta.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación