La Policía trabaja con Interpol para cazar a las bandas del Rolex que operan en las zonas más pudientes de Madrid

Las pesquisas de los casos que aisladamente se han ido reproduciendo en Madrid de estos asaltos, que se iniciaron en Barcelona, fueron lideradas por las comisarías de los distritos más vulnerables en este sentido (y más ricos) de la capital: Chamartín, Centro, Salamanca, Moncloa-Aravaca y Chamberí, sobre todo.

Sin embargo, tras comprobarse que no son una, sino varias, estas organizaciones; que además en muchos casos son transatlánticas, y que llegan a utilizar métodos violentos, la Brigada de Policía Provincial se ha hecho cargo de este relativamente nuevo fenómeno.

Sin existir ninguna alarma ciudadana al respecto, sí es verdad que al tratarse de grupos que vienen, dan los golpes y se van, ha sido necesaria la participación de la Interpol, con la que la Policía española está trabajando.

Uno de los atracos más llamativos fue el del embajador de Emiratos Árabes, esta primavera, cuando caminaba con su mujer y su hija por la calle de Don Ramón de la Cruz, en el barrio de Salamanca. Una moto con dos sujetos con cascos se paró al lado de ellos, y el que iba detrás sacó una pistola y les encañonó. Querían (y se llevaron) el Rolex de 25.000 euros que llevaba la esposa del diplomático. Éste trató de resistirse al atraco, pero se llevó un culatazo del arma en la cabeza. Los ladrones consiguieron huir.

La cooperación internacional está resultando fundamental. En el caso último, el del argentino, que tiene 60 años, actuaba con un consorte, que aún no ha sido arrestado, de ahí que la investigación continúe abierta.

Este sujeto llegó a España a primeros de julio. El día 3, alquiló una moto Yamaha de 600 centímetros cúbicos en el Principado de Andorra. Gracias a que en uno de los golpes que dio se logró captar parcialmente su matrícula, los agentes lo situaron más tarde en un hospedaje de Elche (Alicante), donde fue arrestado el 22 de julio. La moto fue hallada en Salou (Tarragona).

Se le acusa de al menos dos atracos. Su intención era estar aquí dos meses y, con el dinero de sus botines, vivir el resto del año en su país. El 8 de julio, en Ayala con Castellana, por la tarde, asaltó a dos chicas chinas y le arrancó un Patek Philippe de 55.000 euros. Iba con otro compinche en una moto, se subieron en la acera y le arrebataron el reloj a una de ellas. Esa madrugada, asaltaron a un hombre español de 40 años, al que robaron un reloj de la misma marca, valorado en 60.000 euros, cuando salía de un restaurante de Jorge Juan y salían a tomar una copa cerca.

En el registro se hallaron cuatro cascos de moto, otro Patek Philippe, casi 1.000 euros y cuatro teléfonos móviles.