La Comunidad de Madrid no controlaba que tres niñas tuteladas eran prostituidas por la red dominicana

Fuentes del Gobierno autonómico han confirmado este extremo. Explican que, a raíz de saltar en los medios digitales la información sobre la operación Sana, López llamó a González para saber si alguna cría estaba tutelada por ellos. Según estos mismos informantes, la respuesta fue negativa. Y, siguiendo esta versión, ese fue el motivo por el que, a media mañana, Sol emitiera un tuit en el que negaba esa supuesta condición de las víctimas.

Paralelamente, las fuentes policiales consultadas por ABC y otros medios apuntaban a que sí que estaban bajo la protección de Servicios Sociales, al menos algunas de ellas; y que, incluso, otras cuatro habrían pasado por estos recursos asistenciales con anterioridad a los hechos investigados. Por lo que se mostraron en cierto modo sorprendidos de la negativa de la Comunidad.

Sin embargo, desde Delegación del Gobierno aseguran que hubo dos comunicaciones esa mañana entre ambas instituciones. Una primera llamada de López, que, al conocer la noticia, se interesó por si, como él estaba leyendo, había víctimas tuteladas en centros regionales. Además, en ese momento inicial pensaba que era una operación en marcha o muy reciente. Mercedes González le respondió que no conocía ese dato exacto.

Por ello, llamó al jefe superior de Policía de Madrid. Tras ello, llamó a Enrique López para informarle de que no se trataba de una operación en marcha, sino que las 37 detenciones se practicaron el 30 de noviembre . No le dijo si estaban tuteladas o no, pues el informe policial no lo recibió hasta esa tarde, horas después. Aunque señaló que le habían trasladado que hipotéticamente podría haber algún padre implicado en el asunto.

Desde la Consejería de Políticas Sociales insisten en que no van a proporcionar ningún dato acerca de las menores, que se sabe que eran al menos tres las tuteladas en el momento de estos sucesos y ahora hay siete en régimen cerrado y abierto, dependiendo del caso, tras ser rescatadas. Una octava ha vuelto con sus padres, pues tras pasar todo este tiempo, ya ha cumplido la mayoría de edad. En total, fueron salvadas diez adolescentes por la Unidad de Familia y Mujer (Ufam) de la Policía Nacional de Madrid: son ocho españolas, una dominicana y una de origen rumano.

Lo cierto es que a finales de agosto o principios de septiembre, la directora de un centro comunicó la situación tan grave por la que estaba pasando una de las chiquillas. La Policía Nacional la había encontrado en un estado lamentable y la trasladó a los servicios sociales, que la ingresaron en el centro de primera acogida de Hortaleza. Al valorar su drogodependencia, fue derivada a otro centro especializado, cuya localización se ha solicitado no desvelar, donde durante una terapia narró el calvario de violaciones, prostitución en narcopisos y cómo la habían hecho dependiente al ‘crack’.

Era la manera de la mafia de tenerlas comiendo de su mano, a sabiendas de que ese enganche las mantenía sometidas a ellos. Fue entonces cuando la directora del centro comunicó este caso al Grume. Sin embargo, la investigación del caso Sana comenzó meses antes, en abril. Y la Comunidad seguía sin saber nada. Pese, incluso, a que en la investigación ha quedado probado que las menores, al estar en régimen abierto en esos centros (solo están encerrados aquellos menores de la red de recursos para infractores, con una condena impuesta por un juez por haber delinquido), se escapaban incluso durante días.

Era en esos momentos cuando las llevaban a los narcopisos (una estuvo encerrada en Usera tres días, hasta que consiguió escapar y pedir ayuda en un estanco cercano) o a un zulo escondido en el sótano de la barbería dominicana D’Caty de la calle del Monte Igueldo, 42, en el corazón de Puente de Vallecas. Se sospecha que ese era el verdadero centro de operaciones de la banda, a la que pertenecía presuntamente el rapero de 22 años Saymol Fyly, con antecedentes por malos tratos en el ámbito familiar, lesiones, amenazas y delitos contra el patrimonio. Este ‘youtuber’ ahora suma abusos sexuales y un delito contra la salud pública , pues también obligaban a las chicas a vender drogas a clientes e incluso las utilizaban de mulas para llevar las dosis en patinetes a otros toxicómanos hasta sus domicilios.

Desde Política Sociales aclaran que, en cualquier caso en los que un menor no regresa al centro, siempre se pone en conocimiento de la Policía Nacional o la Guardia Civil . En cuanto a este caso, insisten en que desconocen aún la identidad de las víctimas tuteladas, por lo que han solicitado formalmente a los investigadores el atestado de la operación Sana.

Por otra parte, este periódico ha podido saber que al menos una de las adolescentes se ha contagiado de una enfermedad de transmisión sexual, posiblemente VIH ; sus explotadores las obligaban a acostarse con toxicómanos que acudían a los narcopisos sin que usaran protección. Pese a la gravedad del caso, solo hay ocho personas en prisión.