González busca desenmascarar a la «mafia de los espionajes»: «No son aislados y hay muchos implicados»

González, que ahora ejerce como funcionario en el Ayuntamiento de Madrid tras abandonar la política, ha dedicado varios minutos de su primera intervención en la comisión para reiterar que él no tiene «ningún conocimiento del espionaje al que se refieren salvo conocido por los medios de comunicación». Su propósito, ha aseverado, es relatar los cinco espionajes que padeció en la última década con el objetivo de apartarle de sus responsabilidades políticas. Indagaciones que propiciaron la apertura de casos judiciales como Lezo o Púnica .

Para González, estas prácticas de espionajes no solo se han producido en el seno de su expartido, sino también otras organizaciones políticas y empresariales. « Me consta que hay personas de otros partidos, en concreto del PSOE, que han sido víctimas de espionaje », ha afirmado para poner de ejemplo al socialista Joaquín Almunia. «No soy el único que los he sufrido. He sido sufridor de estos espionajes hasta en cinco ocasiones», ha relatado.

Acompañado de una carpeta repleta de documentación que ha entregado para incluir en las actas, el expresidente madrileño ha detallado que el primer espionajes fue en 2009 durante una visita institucional a Colombia (caso Lezo). «Por el presunto espionaje a Isabel Díaz Ayuso aparece una entrevista del detective, donde reconoce que él intervino en una investigación sobre mi persona en relación al Canal de Isabel II en Colombia», ha indicado mostrando el recorte de prensa, como prueba de que Gutiez ha reconocido los hechos que denuncia.

El segundo y tercer caso tiene que ver con el entorno de su excompañero Francisco Granados (caso Púnica) y otro relacionado con su ático en Estepona (Marbella). Detrás de la otra investigación también estaba el excomisario Villarejo y Gutiez (detectives Mira) también inició averiguaciones por encargo de una empresa inmobiliaria. «El señor Gutiez lo negó y se negó a declarar hasta el punto de que llegaron a tener las facturas de los pagos del grupo inmobiliario. Ellos reconocen que sí, que lo contratan, pero que es para espiar a otra persona con la que competía a dirigir un equipo de fútbol», ha indicado.

La jornada ha comenzado con la declaración de la portavoz del Gobierno municipal, Inmaculada Sanz, quien ha asegurado que pocos días antes de que José Luis Martínez-Almeida se contagiase del Covid, a mediados de diciembre del año pasado, el regidor le trasladó el «rumor» que le había llegado sobre una supuesta trama para espiar al entorno de Isabel Díaz Ayuso . A ella le confía la información que le había llegado del propio entorno de la presidenta de la Comunidad de Madrid sobre que un trabajador de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo (EMVS) se habría puesto en contacto con una agencia de detectives para contratar sus servicios.

Este dato que ha revelado la también delegada de Seguridad en la comisión de investigación indica que fue la primera persona del entorno municipal en conocer el caso, puesto que no es hasta el pasado enero cuando el regidor traslada su preocupación al concejal de Vivienda y presidente de la EMVS, Álvaro González .

«Me consultó cómo proceder y estuve de acuerdo con lo que propuso: que el señor González hiciera averiguaciones para ver si hubo contactos con el detective. Me pareció correcto lo que estaba pensando», ha indicado Sanz. «El señor González hace las averiguaciones que ustedes conocen y el detective, como han tenido ocasión de escuchar, niega esas suposiciones«, ha añadido la portavoz municipal que cree que Almeida solo »habla con Carabante (delegado de Medio Ambiente y Movilidad)«: »No tengo información de que lo supiera nadie más hasta el día que sale por la prensa«.

Una vez realizadas las averiguaciones por parte de Carabante y González, la delegada conoció «a posteriori» las «conclusiones». «No conocí los detalles concretos de las averiguaciones, pero sí la conclusión y es que se descartó. Fui informada de las conclusiones a las que se llega, que es que no ha habido ningún tipo de irregularidad, los controles del ayuntamiento son suficientes», ha aseverado.

Por su parte, la delegada de Cultura y portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid ha enmarcado todo el asunto en «solo 'rumore, rumore, rumore' nada más», citando la conocida canción de Raffaella Carrà. «Las cosas que se quedan en rumor, no me preocupan, me preocupan las certezas. Me parece grave lo que ocurre en el gobierno de España, porque se ha probado», ha lanzado.