Iglesias espera el pinchazo de Díaz el 23J para relanzar a Podemos

Desde Podemos señalan que si Yolanda Díaz saca 40 escaños, significaría «la muerte» de Podemos. Pero también avisa de que como Sumar se quede en el umbral de los 20 o 25, diez menos de los que logró en 2019, Podemos presionará.

La calculada falta de presencia mediática permite esquivar las preguntas sobre qué opinan de la estrategia de campaña de Sumar, pero entre bambalinas diversas voces del partido reconocen no estar satisfechas. Otras fuentes lamentaron en las últimas semanas que Díaz cometió «un error» al vetar a Irene Montero «porque le da la razón a la derecha», como también critican que Belarra «está en una posición baja» en la candidatura por Madrid. Es la número cinco. En Podemos temen que su líder no logre escaño, a pesar de que desde Sumar se insiste en que lo tiene garantizado.

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Gregoria Caro

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Podemos ya está preparando el relato por si Díaz no logra un buen resultado. Desde Podemos esgrimen que un partido acabado no logra que 50.000 inscritos participen en una consulta en menos de 24 horas. En referencia a la pregunta a la militancia que hizo la dirección de Podemos para tomar la decisión de integrarse en la coalición de Díaz.

Ante el relato de que la vicepresidenta ha neutralizado a Podemos, desde los circuitos morados insisten en esperar a ver qué pasa el 23J. Podemos no es parte del comité de campaña electoral de Sumar, el gabinete que toma decisiones estratégicas hasta el 23J. Un ejemplo de su nula influencia es que a pesar de que Montero es la ministra de Igualdad, ayer ni ella ni nadie de Podemos participó en el acto de Sumar sobre feminismo.

Otro ejemplo es que el partido dijo desconocer la propuesta de la 'herencia universal' de 20.000 euros que lleva Sumar en el programa para que los jóvenes puedan seguir formándose o emprender.

Fuentes del entorno de Díaz son conscientes de los anhelos de Podemos, pero recuerdan que para evitar una eventual fractura del grupo parlamentario se hizo firmar a los partidos una cláusula preventiva. El acuerdo de coalición con Sumar concede a Podemos el 23 por ciento de la subvención del grupo parlamentario, pero está estipulado que lo perderá si decide irse del mismo. Además, del mismo modo que no están en el equipo de campaña, tampoco tendrán un rol de liderazgo en el Congreso.

Hay detalles sintomáticos que revelan este malestar. La semana pasada, Belarra no pidió el voto para Sumar, sino que lo solicitó para «la coalición de Podemos y Sumar». No quieren perder influencia. Y quien mejor lo demuestra es el exlíder de Podemos desde la libertad de no tener un cargo orgánico. Iglesias lleva desde hace semanas demonizando la configuración de las listas de Sumar y cargando contra la estrategia de Díaz.

En los últimos días, criticó la 'herencia universal' y el tono que la vicepresidenta segunda utiliza en sus discursos, que ridiculiza diciendo que es «bajito» para «no molestar». También cargó contra la «ambigüedad» de Díaz con el referéndum catalán y la acusa de no defender lo que siempre defendió Unidas Podemos para «no perder votos». E insiste en que es «un error» que Montero no esté en las listas.

El líder de Podemos no hace campaña ahora a pesar de que sí la hizo el 28M. Pero Belarra sí estará en Navarra el próximo lunes con Díaz como líder de Podemos y como candidata. Y luego se espera que también participe en el cierre junto al resto de líderes el día 21.

La firma del acuerdo entre Sumar y Podemos no ha supuesto la reconciliación de Díaz con la dirección del partido. De hecho, todo lo contrario, porque estuvieron cerca de no confluir. Pero finalmente Podemos aceptó el veto a Montero para ir unidos.