El Gobierno se abre a modificar la ley del «sólo sí es sí» tras las sentencias que rebajan las penas a los abusadores

La número dos del PSOE ha dicho que «después de algunas sentencias que se han dictado al amparo de la ley» requiere «estudiar esta cuestión», ha dicho, insistiendo en que el Ejecutivo escudriñará estas sentencias para ver «cuáles son las cuestiones en que se ampara» pero también «el propio texto legal».

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Las palabras de la titular de Hacienda y número dos del PSOE se producen no solo después de esas sentencias, sino de que el Ministerio de Igualdad, a través de la delegada del Gobierno contra Violencia de Género, Victoria Rosell, en una rueda de prensa convocada de urgencia junto a la secretaria de Estado Ángela Rodríguez-Pam, arremetiese contra los jueces de la Audiencia Provincial de Madrid que han tomado la decisión de rebajar las penas, ante la petición de algunos de los abogados de los condenados, basadas en la nueva horquilla de condenas que establece la ley del 'solo sí es sí'.

Para Rosell, «el problema no es la ley», sino, a su juicio, una «interpretación voluntarista judicial contra el avance del feminismo», aunque al mismo tiempo ha admitido que es «factible rebajar las penas» desde que entró en vigor la ley conocida como la del 'sí es sí'.

En la misma línea se pronunció hace dos semanas la propia ministra del ramo, Irene Montero, quien en esa ocasión llegó a vaticinar que «todavía no se conoce una sola reducción de penas, y no se va a conocer, es propaganda machista» sentenció. Preguntada por estas palabras este mismo martes, la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, evitaba contestar a las mismas e incluso afirmaba desconocer las sentencias de marras.

La ley del 'solo sí es sí' ha sido desde el principio uno de los asuntos que más roces ha provocado en la coalición de PSOE y Unidas Podemos. En 2020, los reparos técnicos a la misma que expresó el entonces ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, recibieron un furibundo ataque de Pablo Iglesias, a la sazón vicepresidente segundo. Era marzo de 2020, poco antes del primer estado de alarma por el coronavirus, cuando Iglesias afirmó, en inequívoca referencia a Campo, que «en las excusas técnicas hay mucho machista frustrado».