Rueda confía en que Feijóo será «justo» con Galicia desde Moncloa

En esa euforia indisimulada -que sin embargo mira de reojo con cierto nerviosismo al debate de esta noche- ya se da por hecho que Feijóo será el próximo inquilino del Palacio de la Moncloa. Y este domingo Rueda ya avanzó que Galicia «será exigente» con el próximo presidente. «Tenemos que apelar a un poco de ventaja, no solo sentimental, no solo porque conoces lo que aquí se necesita, sino porque eres un presidente justo». El titular de la Xunta regresó a una idea que ya ha expresado con anterioridad: el Gobierno castiga a Galicia para intentar dañar a Núñez Feijóo.

«Llevamos cinco años aguantando desprecios, y este último de especial intensidad», coincidiendo con la llegada del expresidente gallego a Génova, «y a eso le decimos basta». «Nos niegan el pan y la sal desde 2018», insistió, «no es normal que haya 30.000 millones parados, durmiendo el sueño de los justos en los ministerios y aquí tengamos proyectos para crear miles de puestos de trabajo y se nos diga que no, eso es lo primero que hay que desatascar».

Rueda, que está creciendo como orador en los actos del partido, animó a los que quieran saber de Feijóo a que «miren lo que hizo en Galicia», y puso como ejemplo «la reducción del gasto político para hacer más inversiones», bajadas de impuestos por valor «de 1.500 millones de euros ahorrados a los gallegos en estos años», las 60.000 personas «que salieron del paro» en sus mandatos, la gratuidad de las escuelas infantiles, los acuerdos con las universidades públicas o «multiplicar por cuatro» las políticas «de igualdad y conciliación». «Es la prueba de que es el presidente que necesita España», apostilló el mandatario gallego.

«Galicia va a ser un pilar fundamental en tu victoria», garantizó Rueda, «ese compromiso sigue vigente y va aumentando». Nadie en el PPdeG habla de números, «pero las cosas van bien, la temperatura es la adecuada, y tiene que mejorar todavía», añadió. En esa toma térmica hay una derivada que empieza a tomar cuerpo a modo de secuela: un importante triunfo de Feijóo que lo catapulte a Moncloa abriría el debate en la Presidencia de la Xunta sobre la idoneidad de un adelanto de las autonómicas al otoño. El escenario ya no es remoto ni improbable. Más bien todo lo contrario.

Feijóo y Mariano Rajoy aprovecharon la oportunidad para expresar su apoyo por la gestión de Rueda en estos últimos meses. «Se ha revelado como un gran presidente de la Xunta, estamos todos orgullosos de él y no era fácil sustituyendo a quien tuvo que sustituir», destacó el expresidente del Gobierno. Hubo mensajes en clave interna. A Rueda no se le escapó por casualidad un guiño a Manuel Baltar. «Gracias por muchas cosas, pero sobre todo por tu generosidad, por trasladar el mensaje de que el partido está por encima de otras muchas cosas». De fondo, el relevo en la Diputación de Orense.

Rueda no desaprovechó la ocasión para cargar contra la oposición. Primero contra un PSdeG que es «una sucursal de Moncloa, que dice amén» a todo «y que tapa todas las vergüenzas» del Gobierno; pero también contra un BNG «que le dio el apoyo a Pedro Sánchez durante cuatro años a cambio de nada». «Nada consiguieron», aunque «hay un montón de folios de supuestas peticiones».

El candidato del PP no pudo sustraerse de la nostalgia de los mítines vividos en la Plaza de Toros y los años de gobierno en Galicia. «Estoy muy orgulloso de todos vosotros, y de ser uno de vosotros, de haber sido afiliado del PP de Galicia 16 años y de seguir siendo un militante de Galicia, como seré siempre, y de sentir el caudal de cariño que me dais por cada calle, por cada pueblo», confesó Feijóo, «y espero que os sintáis orgullosos de mí ocurra lo que ocurra el 23J».

Precisamente, Núñez Feijóo se comprometió a que, con independencia del resultado que dicten las urnas, «yo vendré el 25 de julio al Apóstol para sustituir a la alcaldesa del Bloque», Goretti Sanmartín, que ya ha anunciado que no acudirá al acto solemne de la Ofrenda en la Catedral. El candidato del PP recordó que su partido dio las alcaldías de Barcelona y Vitoria al PSOE a cambio de nada, pero que este partido se negó a permitir el gobierno de Borja Verea y, sin embargo, «se la dio a un partido soberanista». «El PSOE ya no es un partido de estado», sentenció. De Pontevedra, a seguir preparando el debate de hoy. Y quién sabe si volverá a haber Plaza de Toros antes de fin de año.