El garabato del torreón
Moncho Reboiras
Nunca entendimos, ni de lejos, sus principios, ni sus objetivos ni sus procedimientos. Pero su muerte lo hace acreedor de nuestro mayor respeto
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónQuizá porque anda sobrada de ocio, a la desnortada porción nacionalista en el gobierno de la ciudad que habito le ha dado ahora por dedicar un busto a Moncho Reboiras, personaje que, por simple razón cronológica, la desnortada porción no conoció. Otros (también por simple ... razón cronológica) sí lo conocimos. Nunca entendimos, ni de lejos, sus principios, ni sus objetivos ni sus procedimientos. Ello no obstante, las circunstancias de su muerte lo hacen acreedor de nuestro mayor respeto.
Cómo en el resto de España, fue duro en Galicia el prólogo del final. Había tiros al aire y tiros a la barriga. Y asaltos a algún banco. Y el golpe de ETA a las oficinas del DNI en Lugo, con un botín de cientos de carnés en blanco pero estampillados y firmados. La UPG aleteaba en medio de un notable cacao mental: pretendía ensamblar nacionalismo y comunismo, aspiración que al PC le cabreaba bastante, supongo que por contradictoria y competitiva más que por utópica.
Desde finales de los 60 (o tal vez principios de los 70), Reboiras estaba en la UPG, llevado allí de la mano de Xosé González. No era uno cualquiera: inteligente, activo, valiente.… e idealista. Creo recordar que alguien decidió responsabilizarlo de un llamado «frente armado», el ala de la organización más estricta en su normativa: nunca causar daño a las personas. Confieso que sigue siendo para mí un capítulo brumoso, como las relaciones del 'Fronte' con Eta político-militar y con el PC portugués y la Liga de Unidade e Acçao.
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete