Los diez dardos de Macarena Olona contra Vox: «Van a por mí»

Olona aseguró que Vox ya no es el mismo partido político que en el que ella comenzó a dar sus primeros pasos en la política. Hizo referencia a ciertas «estructuras» que «se han creado» alrededor de la formación, una de ellas la Fundación Disenso, e insinuó que el poder de decisión del partido no estaría solo en Abascal.

La exdiputada afirmó durante la entrevista que muchas de las decisiones, sobre todo aquellas de mayor calado, se ven influenciadas por personas que las «toman fuera de Vox», llegando a manifestar que su presidente no actúa con total libertad.

Durante la entrevista también hubo referencia cinematográfica, concretamente a 'American History X', una película en la que, según las propias palabras de Olona, una persona que forma parte de una organización decide dejar de formar parte de ella y los antiguos miembros no se lo permiten hasta el punto de que matan a su hermano. Un ejemplo que utilizó para ilustrar «el señalamiento» que está padeciendo.

En la película 'American History X', la organización que aparece es nazi. Preguntada por esta cuestión, la exdiputada rebajó el tono y declaró que con esta referencia «no quiere decir que Vox sea un partido nazi», aunque sí expuso que hay personas cercanas que «hacen loas a Hitler».

Sin dar nombres, Macarena Olona relató que en una ocasión, «cuenta una anécdota», mientras se celebraba una reunión «una persona dentro de la dirección» manifestó que «no quería que hubiera mujeres para no caer en tentaciones». La exdiputada confesó que esto le «preocupó» cuando vio que al entrar en el Gobierno de Castilla y León «los elegidos eran solo hombres».

Otra de las cuestiones que la ex de Vox reprochó al partido de Santiago Abascal es que están utilizando su salud mental para desautorizarla públicamente. Olona afirmó que están trasladando la idea de que está «loca» y que tiene «problemas de salud mental». «Es muy injusto», aseveró.

La exdiputada no justificó su marcha únicamente en sus problemas de salud, que también influyeron en la toma de la decisión, sino que además aludió a que dentro del partido «iban a apagar» su voz. «Me convertí en un obstáculo para la deriva de Vox, una deriva con posicionamientos que no me representan», insistió Olona.

La duda sobre si Macarena Olona llegará a presentarse a unas elecciones por su cuenta también estuvo presente durante la entrevista. De momento, afirma que «estará del lado de los españoles» y descarta que vaya a concurrir en la cita del 28-M.

«Necesitan destruirme, pero no se dan cuenta que si me destruyen a mi, destruyen la ilusión en votantes de Vox y no votantes de Vox que se han visto representados en mi defensa de los españoles», expuso Olona, quien aseguró: «Por supuesto que van a por mí».

La exdiputada manifestó que es «poco inteligente» ir contra ella, sabiendo que ha formado parte del partido, insinuando que tiene información que podría dañar la formación. También explicó que «si alguien ha querido atacarla dentro de Vox», no lo han hecho «de frente».

Olona confesó que una de las cosas que más le «está costando» es «conseguir que los golpes no sean en punto vital». «No soy infalible», manifestó. Remarcó que lo que está viviendo «es un señalamiento como enemigo», pero advirtió de que «si alguien en Vox tiene la impresión de que no se puede salir del partido del macho alfa, sin pedir permiso ni autorización», con ella «se ha equivocado profundamente».