La crisis del 'sí es sí' retrasa el proyecto de Yolanda Díaz y empodera a Podemos frente a ella
La vicepresidenta y la formación morada se reúnen de forma bilateral para negociar
La coalición se perfila como la fórmula más óptima
Yolanda Díaz, este jueves en un acto en Madrid
La historia de la configuración de Sumar se resume a día de hoy en la espera de un momento perfecto que nunca termina de llegar. En 2021, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, anunció que para la primavera del año pasado habría empezado ya ... con el llamado proceso de escucha de su proyecto. Pero tuvo que retrasar la presentación a junio, porque estalló la guerra de Ucrania.
En diciembre, en el Salón de Pasos Perdidos del Congreso, el Día de la Constitución, Díaz comentó a un grupo de periodistas de forma informal que iba a adelantar a febrero las conclusiones de su gira por los territorios y la presentación de su candidatura, por el ruido y la incertidumbre que la espera suscita en la izquierda.
Pero hace un mes reventó en el seno del Gobierno de coalición la crisis por la reforma de la ley del 'solo sí es sí' y su calendario volvió a verse alterado. Varias fuentes de Unidas Podemos reconocen que en medio del choque de este partido con el PSOE y el goteo de rebajas de condenas a delincuentes sexuales «no era un buen momento» para hacer los actos finales de Sumar.
Desde que Podemos aumentó la tensión con los socialistas en enero, Díaz intentó aislar su proyecto político de la crisis del 'sí es sí' tanto en sus declaraciones como en sus actos de escucha. Y en consecuencia volvió a retrasar las conclusiones del proceso de escucha y la formalización de su candidatura a presidir el Gobierno.
Son Podemos y el Ministerio de Igualdad de Irene Montero, número dos del partido morado, quienes asumieron y –aprovechan como baza electoral– la oposición a la reforma que plantea el PSOE. Mientras, elevan el tono y multiplican sus frentes de presión en el seno del Consejo de Ministros. Díaz ha transmitido su apoyo en abierto y en privado a Montero; se alinea con Podemos en que no se puede recuperar la diferencia entre agresión con y sin violencia o intimidación, como plantean el Ministerio de Justicia y Moncloa.
Pero se ha mantenido al margen de la batalla contra el PSOE y guarda desde el principio un calculado perfil bajo. Esta decisión está dejando más espacio a Montero y a la líder de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, ya que se trata de uno de los enfrentamientos más graves con el PSOE. Todavía hoy siguen sin un acuerdo a 12 días de la toma en consideración de la reforma unilateral del PSOE. Sin el apoyo de Unidas Podemos, se prevé que inicie su tramitación parlamentaria con el apoyo del PP.
Marzo, como pronto
En el equipo de la vicepresidenta son muy celosos con los tiempos de Díaz y Sumar, pero aseguran que la presentación de la candidatura no llegará la semana que viene por lo que ya se sitúan –como pronto– en marzo. Sin que la vicepresidenta diga que quiere ser la candidata de Sumar al Gobierno, en Podemos aseguran que no pueden sentarse a negociar fórmulas jurídicas para concurrir a las elecciones ni el encaje de sus candidatos en las listas.
Díaz confirmó hace unos días que lleva mes y medio abordando con Podemos las bases de lo que será esa negociación de cara a las generales. Desde el equipo de la vicepresidenta aseguran que son reuniones bilaterales y que se empezó por Podemos «como no podía ser de otra manera» por ser el actor hegemónico a la izquierda del PSOE.
Nada que ver con la mesa de partidos que el ministro de Consumo y líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, propuso a finales de año y a la que Podemos se negó por considerar que ellos no podían debatir en igualdad de condiciones con otros actores con un peso mucho menor como, por ejemplo, Más País de Íñigo Errejón. Siendo Más Madrid, marca regional, líderes de la oposición en Madrid. «Nosotros nunca planteamos eso, fue Garzón», explican desde Sumar sobre la propuesta del líder de IU. Queda descartada.
Desde Sumar también aseguran que están hablando con todos los partidos a la izquierda del PSOE con conversaciones «a todos los niveles». Pero se niegan a dar más detalles y apelan a la discreción máxima. La tensión con Podemos y la mala relación con el exlíder Pablo Iglesias de los últimos meses, según explican, queda apartada para poder llegar a un acuerdo electoral. «Eso es lo que nos pide la mayoría», apuntan en Sumar.
En Podemos también confirman estos contactos, pero lamentan que lo único que les ha trasladado la vicepresidenta es que hasta verano no empezará a negociar el encaje en las listas electorales. Belarra y Montero aseguran que van «tarde» para negociar.
En Podemos admiten cierta preocupación porque no empiece a negociarse hasta verano. Aseguran que tienen voluntad para llegar a un acuerdo, pero reconocen que tendrán poco margen en un escenario muy volátil para unas negociaciones que van a ser muy complicadas. El partido morado nunca ha descartado que el presidente, Pedro Sánchez, adelante las elecciones. Y eso podría tener consecuencias tan negativas como cogerles sin un acuerdo o forzarles a cerrarlo con prisas. Más allá de la forma jurídica con la que se presenten a las generales, y cuya alternativa más viable en términos electorales, según empiezan a coincidir todos, se trata de una coalición de partidos, la gran batalla será la configuración de las candidaturas.
El ejemplo con el que los dirigentes de Podemos ilustran esta difícil situación es la batalla que anticipan en la circunscripción de Madrid. La vicepresidenta segunda tendrá que buscar el encaje en los puestos de salida para ella misma (Sumar), Irene Montero (Podemos), Íñigo Errejón (Más País), Enrique Santiago (PCE), un candidato de Izquierda Unida y, algo que nadie descarta, algún perfil independiente que Díaz considere ventajoso introducir como golpe de efecto. Se trata como mínimo de cinco nombres y no todos tienen garantizado su escaño por la capital según las expectativas demoscópicas.
En las próximas semanas, Díaz continuará con su gira por los territorios para movilizar a los votantes de izquierdas y presentar su proyecto: se esperan visitas a Castilla-La Mancha, Murcia, Cantabria, Andalucía y Canarias. Podemos seguirá multiplicando sus frentes contra el PSOE de cara a las elecciones municipales del 28-M y dando la batalla por el 'sí es sí' para llegar al verano con fuerza y negociar sus puestos de salida en las candidaturas desde una buena posición.