Debería resultar sencillo entender que cuando un establecimiento se encuentra con las puertas bloqueadas, la persiana medio bajada y sus empleados manifiestan que no están atendiendo todavía al público o lo han dejado de hacer porque se ha acabado su jornada, simplemente significa que está ... cerrado. Pues aún así, hosteleros y camareros se topan cada día con clientes que quieren ser servidos fuera del horario laboral.
Sobre este polémico tema versa la última publicación viral del creador de contenido y altavoz contra casos de discriminación y explotación laboral en la hostelería Jesús Soriano, más conocido en su 'nickname' de redes sociales como 'Soy Camarero'. Este post ya ha sido visualizado por más de 200.000 personas y más de 5.000 le han dado me gusta, además de registrar cientos de comentarios.
Para poner en contexto el debate que ha generado, todo comienza con la reseña negativa de un cliente a un bar por no darle servicio alguno. «No me pareció nada bien que estábamos un viernes a las 20.30 de la tarde y la camarera y el cocinero, aún viéndonos, no nos abrieron la puerta», lamenta.
El comensal continúa su queja aludiendo que sólo tocaron para pedir unas pizzas y que no tuvieron más remedio que marcharse del local porque no les abrieron la puerta, «ni siquiera les preguntaron qué querían», según termina el mensaje.
Lejos de eludir la crítica, el propietario del local hostelero decide responder, aunque normalmente evita hacerlo, y apunta que no llegaron sobre las 20.30 horas como dice el cliente si no que eran las 19.30 horas, una hora antes. «Si la puerta está cerrada será porque no está abierto», ironiza el gerente.
«Tengo un horario y la gente tiene derecho a descansar, ya que habíamos terminado del turno de medio día a las 19.00. Entonces, como yo esclavista no soy, respeto el horario del trabajador», sentencia, no sin antes concluir apuntándole que «recuerde que un establecimiento está abierto cuando la puerta se abre».
El rosario de reacciones se ha desplegado inmediatamente en torno a la publicación de Soy Camarero, cuya publicación ha provocado que algunos seguidores lamenten la «injusticia» de que haya gente que escriba reseñas negativas sólo porque estaba cerrado el restaurante. «Estoy harto de la gente llamando a la puerta 40 minutos antes o 20 después con el horario colgado en la puerta», critica otro 'follower'.
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