«No quiero ver a mi hijo llorar, me da igual si aprende en valenciano o castellano»: el miedo a separar alumnos de clase

Ella no piensa ceder y renunciar a elegir la lengua materna de su hija, de quien tuvo que ver su foto utilizada sin su consentimiento junto a otros compañeros de clase en una campaña interna para influir en los progenitores. «Mamá, vota valenciano, sí o sí, tú puedes, ¡vamos!», se les veía escribir a los alumnos, tal como reveló ABC. «Eso es una decisión que deben tomar los padres, los niños no tienen conciencia para elegir», defiende.

Aunque valora la calidad educativa del centro y opina que no han llegado a los extremos de «radicalidad» que se han visto en otros, «lo hacen disimuladamente» y no comparte este posicionamiento por uno de los dos idiomas ante esta consulta telemática, que arrancó el pasado 25 de febrero y concluye el 4 de marzo.

«Les han dicho a los niños que los van a separar, sino desde el centro, a través de las familias», lo que a su juicio ha «metido el miedo en el cuerpo» a muchos, sobre todo, que «a esas edades» ese vínculo de amistad suele ser muy fuerte.

«Los tiempos cambian, a mí me separaban de compañeros de clase, al pasar de curso, pero no era un trauma, aparte de que te seguías viendo fuera y en el patio, pero ahora ellos van a estar juntos de los tres a los doce años y sí lo ven como un drama», compara esta madre, para quien priman otros criterios menos emocionales y más pedagógicos: «Veo más importante aprender en tu lengua materna, es lo que te sale al hablar con naturalidad, o contestar en un examen».

Frente a esta alerta y otras, varias asociaciones afines de defensa del uso del castellano, como Hablamos Español, Escuela de Todos o la Plataforma de Docentes por la Libertad Lingüística, además de la confederación autonómica de familias Covapa, han tratado de tranquilizar y han propugnado que madres y padres voten en libertad ajenos a las presiones.

«Los padres han recibido un e-mail de la Conselleria con una carta (lo pusieron en el grupo de whatsapp) desmintiendo los bulos, como lo que la red de libros dejaba de ser gratuita si votas castellano, o que bajaba la calidad, algo están haciendo, pero es imposible revertir el daño», explica esta madre desde Elche. Su mensaje también apela a la neutralidad: «Votad en libertad, que todo el mundo esté contento».