En la Comunidad Valenciana ningún partido logrará la mayoría absoluta en las elecciones autonómicas y, a día de hoy, todas las combinaciones resultan posibles. La citada encuesta, publicada a finales de abril, sitúa al PSPV-PSOE de Ximo Puig en una horquilla de entre 28 y 30 diputados. El abismo que separa a los socialistas de la mayoría absoluta en las Cortes Valencianas (cincuenta escaños) deberá recorrerlo de la mano de sus actuales socios. Compromís, con Joan Baldoví de candidato, quedaría con 16 parlamentarios. Podemos, que concurre con el vicepresidente de la Generalitat, Héctor Illueca, obtendría cuatro representantes.
La suma de las tres fuerzas de izquierdas quedaría pues entre los 48 y los 50 escaños. Es decir, PSPV-PSOE, Compromís y Podemos se mueven entre la bancada de la oposición y un tercer acuerdo del Botánico por la mínima que les permitiría seguir al frente de la Generalitat una nueva legislatura.
En el flanco de la derecha, Sigma Dos coloca al PP de Carlos Mazón en la franja que va de los 36 a los 38 diputados. Vox, con Carlos Flores Juberías de cabeza de lista, obtendría entre 13 y 14 parlamentarios. En resumen: 49 escaños en la parte baja de la horquilla y 52 en la alta. Es decir, entre la oposición otros cuatro años o con un Gobierno con el modelo de Castilla y León en la Comunidad Valenciana.
Al margen de las encuestas publicadas en las últimas semanas, los sondeos que ya se están realizando para ofrecer las primeras estimaciones de voto cuando cierren los colegios electorales el 28M vaticinan también la igualdad máxima entre bloques, que se dirimirá por un escaso margen.
Por contra, según ha podido saber ABC, los estudios para las elecciones municipales en el Ayuntamiento de Valencia sí perfilan una mayoría clara del PP y Vox, que superarían los 17 concejales necesarios para formar gobierno y mandar a la oposición a Compromís y el PSPV-PSOE.
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