Carles Santos: «Soy de la escuela de Brossa»

El título, «Patetisme il.lustrat», es muy significativo. «Está referido a mí –declara sin tapujos-. Me ayuda mucho la edad... soy de la escuela de Brossa y por lo tanto soy viejo. Y lo de ilustrado es porque incluyo muchas cosas de la cultura de nuestro país».

Mónica López (actriz), Dory Sánchez (bailarina) y Núria Andorrà (música) son sus cómplices en esta aventura. Si Dory se atreve a decir que bailar sus coreografías es como bailar un dúo con Santos, Mónica López también declara que recitar sus textos es hacer un dúo con el músico. Santos calla y habla por boca de Mónica López. «Las tres interpretamos el mundo de Santos», anuncia López a la que veremos en una de las escenas a lomos del propio autor.

El trabajo con el maestro no es cómodo. «Lo primero que me pidió es que no estuviera cómoda en mi interpretación. Que busque cosas nuevas y que una vez que encuentre algo lo deseche», explica López que ya trabajó a sus órdenes en «Brossalobrossotdebrossat».

Ni piano ni instrumentos en escena. «Sonará música de los setenta con el ruido de cintas magnetofónicas incluido», advierte Santos mientras aclara que hoy en día no tiene ningún sentido quemar un piano en escena.

Su mera presencia ya es un espectáculo. «Antes pasaban muchas cosas y hacíamos muchas cosas –comenta con nostalgia-. No me gustan los músicos de ahora que dependen de un enchufe. En esta obra si se va la luz no pasa nada».

«Carles Santos es un músico que quiere trabajar en un teatro», destaca Salvador Sunyer, director de Temporada Alta , que está muy contento de que participe en su festival. Y Xavier Albertí, director del TNC, destaca que ya es hora que El Liceu le encargue una gran ópera. A esto último, Santos responde que «hay otras cosas en la vida más interesantes y que ya hizo un “Barbero de Sevilla” para Perelada».