La Gala más esperada

Y como un manto sobre todo, la Gala de la Tauromaquia Catalana que organiza la Federación de Entidades Taurinas Catalanas. Un día grande para muchos aficionados, que este año tiene además motivos para la ilusión en ese objetivo de que la Monumental barcelonesa vuelva a abrir sus puertas para celebrar un espectáculo taurino. Una ilusión, un sueño que gira en torno a un chaval de Hospitalet que ha significado una auténtica inyección de moral a esa auténtica resistencia taurina que sigue en la lucha.

La Gala se ha anunciado para el próximo día 30 en Masía Can Cortada de la capital catalana. Allí se va a rendir homenaje a Mario Vilau, flamante ganador de la Liga Nacional de Novilladas y joven diestro sobre el que los aficionados han depositado sus anhelos. ¿Por qué no? Es la pregunta que va de boca en boca. Ahora hay condiciones, hay motivos sobre los que apuntalar la reivindicación que sobrevuela sobre las espaldas del chaval, ya una realidad en el panorama taurino nacional.

Y en medio de esa sensación, que convierte la Gala de la Tauromaquia Catalana en el epicentro de una demanda, de una exigencia colectiva, también se va a reconocer a la Agrupación Española de Ganaderos de Reses Bravas, que siempre ha estado al lado de la Federación en el apoyo a los trabajos de investigación sobre la Fiesta. También va a ser distinguido el diseñador e ilustrador Iván Estupiñá, con una intensa labor en carteles para plazas de la importancia de Madrid, Sevilla, Pamplona o Lima.

La Gala está servida, y, más que nunca, va a ser la Gala de la ilusión, la más esperada.