Rodrigo Alonso: «Atapuerca nunca está vista para sentencia. Sigue dando sorpresas»

¿Qué supone para usted estar al frente del 'Sistema Atapuerca'?

En primer lugar, un agradecimiento a la Consejería y a su responsable, que han confiado en mí para esta función. Luego, un poco de vértigo ante todo lo que es el Sistema Atapuerca, pero sobre todo una responsabilidad y una oportunidad para materializar un nuevo proyecto que permita dar un impulso diferenciador tanto al museo como al resto de instalaciones.

¿Qué retos se ha propuesto asumir?

Principalmente queremos trabajar tres líneas: una va a ser potenciar el turismo educativo atendiendo a todo el espectro, desde Infantil hasta el ámbito universitario, tanto en el museo como en los yacimientos y en el centro de arqueología experimental. Otra línea de trabajo será la de articular una programación cultural y científica con proyección nacional, y una tercera y muy importante, convertir al museo en un lugar de referencia a la vanguardia de la divulgación científica. Es decir, que el propio centro y el resto de sus instalaciones sirvan para dar a conocer los resultados de todas las investigaciones que sobre la evolución humana se hacen a nivel nacional.

El MEH cumple 15 años este 2025. ¿Se va a celebrar de manera especial?

Sí. Estamos trabajando ya para organizar una programación especial, que comenzará en julio. El día 13 de ese mes es cuando cumplimos los 15 años y será el punto inicial de un programa que se extenderá durante todo un año, que recogerá las dos líneas de las que he hablado: ciencia y cultura.-¿Nos sorprenderá alguna exposición temporal particularmente?-Sí. Vamos a tener una muy singular sobre niños preneandertales que esperemos vea la luz este verano.

¿Cree que el 'Sistema Atapuerca' notará la ausencia de Eudald Carbonell y José María Bermúdez de Castro, ya jubilados?

Aún está Juan Luis Arsuaga, y yo creo que una de las mejores herencias que han dejado, igual que lo hizo Emiliano, ha sido un gran equipo de investigación. Seis personas que vienen a recoger todas las tendencias y variabilidad que hay dentro del propio proyecto y, por lo tanto, no tiene por qué notarse el cambio.

En abril pasó por los cines la película 'La huella del mal', el debut de Manuel Ríos San Martín, rodada gran parte en los yacimientos y en el museo. ¿Confía en que aumente el interés por visitar las instalaciones burgalesas?

Entrar en el mundo del cine no documental nos da proyección y llegar a un espectro que tenga curiosidad. Hoy día hay un tipo de turismo enfocado en los escenarios de rodaje y yo creo que puede tener una repercusión positiva en el número de visitantes. No sé cuándo se notará, si ahora o más adelante, pero seguro que sí.

¿Tiene tanto el museo como los yacimientos margen para seguir ganando visitantes? ¿De qué perfil?

Siempre hay una ratio de crecimiento, pero hay que buscarlo dentro de la sostenibilidad. Siempre digo que lo que nos interesa es la calidad. Tanto yo como el resto de gente que trabaja en el 'Sistema Atapuerca' nos sentimos contentos cuando el visitante repite. Ese sembrar para recoger, esa redundancia de visitas, es tanto o más importante.

Aún así, la exposición permanente del museo obtuvo en 2024 el segundo mejor dato de su historia. ¿Tiene en mente seguir ampliándola?

La vamos renovando de forma muy puntual. Uno de los grandes logros que ha tenido el museo a lo largo de estos 15 años es una museografía que no ha caducado. Hubo una gran inversión económica y trabajo para que así fuera. Y sí que se va implementando de forma progresiva.

Hace unos meses salió a la luz que Pink, el fósil hallado en 2022, revela la existencia de una población nunca antes vista en Europa Occidental. ¿Este hallazgo tendrá su reflejo en el museo?

Ya tenemos un audiovisual que explica su singularidad. El fósil, evidentemente, va a tardar en llegar porque se acaba de realizar el primer estudio preliminar y ahora habrá otros trabajos parejos tanto sobre él como sobre su contexto.

Burgos está trabajando en la candidatura para lograr la Capitalidad Europea de la Cultura en 2031. ¿Qué puede aportar el MEH?

Nosotros lo que podemos dar es una perspectiva histórica de las cosas. Al fin y al cabo, no sólo estudiamos nuestro pasado más remoto, sino un proceso evolutivo que nos lleva hasta la actualidad. No podemos comprender hoy lo que somos sin entender el pasado. Esa visión diacrónica de las cosas puede ser un valor añadido a la candidatura que se está construyendo desde el Ayuntamiento de Burgos.

Es la 'joya de la corona' de los museos regionales. ¿Cuenta el MEH con suficiente presupuesto?

Siempre nos gustaría contar con una mayor partida, pero sí que tenemos unos presupuestos más o menos racionales que nos permiten desarrollar proyectos y diferentes acciones.

Usted ha pasado por diferentes departamentos y programas del museo. También participó en numerosas campañas en el yacimiento. ¿Qué diría de todo este enclave a alguien que no hubiera oído nada de él?

Pues que está ante un lugar único y excepcional en el mundo.

¿Nos seguirá, entonces, sorprendiendo?

Atapuerca no ha parado de darnos sorpresas. Cuando pensábamos que estaba todo visto para sentencia, nunca lo ha estado. Prácticamente es una cantera inagotable de fósiles de diferentes cronologías, que precisamente es uno de sus valores. No es un yacimiento sino un conjunto de yacimientos que permiten entender el poblamiento humano desde hace 1,3 millones de años a la actualidad.