«Nuestra mano tendida para intentar alcanzar el acuerdo más amplio posible», ha reiterado este lunes el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, en su comparecencia en las Cortes para presentar el Proyecto de Presupuestos de Castilla y León para 2026, con la ... que da comienzo la tramitación parlamentaria de las Cuentas de cara a una aprobación que no está garantizada dada la minoría en la que está el partido de Gobierno, el PP. Así que el responsable de las arcas autonómicas ha vuelto a llamar «al acuerdo», eso sí, dejando claro que «que no queremos excluir a ningún partido, y en el que todos los partidos con representación parlamentaria están invitados a participar», en clara alusión expresa a la propuesta descartada del PSOE -el principal partido de la oposición- de negociar sólo entre ambos, y también a Vox -el otro con el que poder sumar los votos suficientes para el sí y que también ha puesto ya de antemano sus condiciones-.
«Confío especialmente en su responsabilidad y en su compromiso con Castilla y León», ha apelado Carriedo, llamando a analizar las cuentas «por su contenido y no por el legítimo interés de cada partido». Y es que los que podrían convertirse en los últimos presupuestos de la legislatura llegan al Parlamento con las próximas elecciones a la vista en un plazo no superior a cuatro meses, de ahí que haya pedido «decidir» el voto «pensando en el interés de esta Comunidad y no en las próximas elecciones», convenido de que de sacar adelante este cuadrante de ingresos, gastos, proyectos… «dejaremos un mejor escenario y mayor estabilidad para el gobierno que resulte de las próximas elecciones autonómicas».
Un proyecto que asciende a 15.715,61 millones de euros, el «más elevado» en la historia de Castilla y León -un 7,92 por ciento de alza- que tiene como «principales rasgos» la búsqueda de la «excelencia» en la prestación de servicios públicos; «protege» a las familias, jóvenes y mayores; «focaliza» la inversión en sectores prioritario y «garantiza un futuro para un medio rural cohesionado y sostenible». También, ha desgranado el consejero, es «expansivo y creíble», a la par que «participativo» y cuenta con una política tributaria «moderada, inteligente y selectiva». Precisamente, en este sentido el titular de la cartera de Economía y Hacienda ha defendido que la
Comunidad contará en 2026 con «los mayores beneficios fiscales en la historia» de Castilla y León.
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