Menos del 30% de las empresas incluyen en sus convenios colectivos menciones al colectivo LGTBI

Así lo señaló la secretaria general del sindicato, Lola Alcónez, que destacó la «importancia» de estas medidas que, tal y como recoge el Real Decreto 1026/2024 que entró en vigor en octubre del año pasado, son de obligado cumplimiento para aquellas empresas de más de 50 trabajadores. «Debemos conseguir entornos laborales más respetuosos, donde prevalezca la igualdad en la que no haya un perjuicio a ningún trabajador porque refiera una identidad o porque exprese una orientación sexual», afirmó.

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En este sentido, José Álvarez, miembro del equipo Confederal LGTBI, explicó que es un «hito histórico» ya que España es el primer país del mundo y UGT, el primer sindicato, que consigue que su país tenga una legislación en materia laboral, «que regule la diversidad LGTBI dentro de los centros de trabajo». «Ahora Europa y la Confederación Europea de Sindicatos está fijándose en España y en esta iniciativa promovida por UGT», aseguró.

Este documento, según indicó, ofrece un contexto histórico sobre la realidad LGTBI y aporta datos de la encuesta realizada por el sindicato sobre las discriminaciones del colectivo. Además, recoge las medidas plasmadas en el real decreto y las propuestas que realiza UGT y que incluyen, entre otras, cláusulas de igualdad de trato y no discriminación, medidas de acceso al empleo, medidas de promoción y de formación, un protocolo de actuación para la atención del acoso y la violencia contras las personas LGTBI y un protocolo de acompañamiento a personas trans en el trabajo.

En esta línea, reconoció que «se va avanzando» en la aplicación de estas medidas dentro de las empresas aunque sigue siendo bajo, ya que según un estudio en los años 2020 y 2021, la mención al colectivo LGTBI estaba «por debajo del 30 por ciento de los convenios colectivos». Por ello, lamentó que la condición sexual siga siendo «una gran barrera» para acceder al mercado laboral porque «o bien no te llaman cuando te hacen una entrevista de trabajo o luego sufres discriminación en el día a día, que es también la parte insufrible porque es tu capacidad económica la que se pone en juego y tu dignidad personal».

Por último, y sobre la polémica que en los últimos años está suponiendo la colocación de banderas en las fachadas de las instituciones, como es el caso del Ayuntamiento de Toledo, indicó que «es una cuestión política» y hay que «visibilizar al colectivo porque lo que no se muestra no se ve». 

Por último, recordó que, afortunadamente, ya hay sentencias que ya dicen que la bandera arco iris es una bandera libre que abarca la diversidad».