Las 'Mujeres Progresistas' de Toledo dicen que luchar contra la violencia de género «no consiste en reunir cuatro veces contadas el Consejo Local»

Una vez más, el Paseo de Sisebuto, mientras la Vega está en obras, ha acogido la concentración mensual contra la violencia de género organizada por el Consejo Local de la Mujer. Una cita que volvió a estar marcada por el creciente enfrentamiento entre Gobierno y oposición, así como por la voz especialmente crítica del colectivo Mujeres Progresistas, encargado de leer el manifiesto.

En su manifiesto, Mujeres Progresistas advirtieron de que la violencia de género sigue siendo «una emergencia social» y criticaron la falta de continuidad en las políticas y acciones públicas: «Luchar contra la violencia de género no consiste en reunirse cuatro veces contadas en el Consejo Local, leer un manifiesto el primer martes del mes y manifestarnos dos veces al año». Recordaron que la violencia machista –física, vicaria, psicológica, sexual, económica e institucional– «no es un problema privado ni aislado», sino la consecuencia de un sistema que aún permite «el control, el miedo y el silencio sobre la vida de las mujeres». Pidieron protección, recursos suficientes, justicia eficaz, prevención, educación y tolerancia cero ante «el negacionismo y la invisibilización».

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F.F.

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La concejala de Asuntos Sociales, Marisol Illescas, volvió a pedir unidad para combatir la violencia machista, lamentando que cada mes se repita «un cruce de acusaciones que olvida a las mujeres asesinadas y a sus familias». Illescas subrayó el compromiso del Gobierno municipal, recordando que solo este mes se han organizado 24 actividades de sensibilización, además de las iniciativas permanentes de la Escuela Toledana de Igualdad. Pidió dejar a un lado la confrontación política: «La mejor forma de combatir la violencia machista es la unidad, no hacer política ni bandos con un problema tan serio». También defendió la necesidad de respetar todas las formas de reivindicación feminista y reclamó «sensatez, sensibilidad y unidad» tras las tensiones vividas en los actos del 25-N.

La viceportavoz socialista, Ana Abellán, denunció que el alcalde esté «desvirtuando el Consejo Local de la Mujer» y aplicando políticas «de fotografía», mientras adopta conceptos propios de Vox sustituyendo el término «violencia machista» por «violencia intrafamiliar». Recordó que 41 mujeres han sido asesinadas en lo que va de año, cinco en noviembre: «Detrás de cada número hay mujeres con nombres y apellidos. No podemos normalizar esta violencia». Abellán criticó la eliminación de la antigua Concejalía de Igualdad, la supresión de las convocatorias institucionales del 8-M y 25-N, y la desaparición del premio Princesa Galiana de los presupuestos municipales. Acusó además al alcalde de actuar en solitario en actos oficiales: «Habla de unidad, pero cuando hay que poner el lazo en el Ayuntamiento el 24 de noviembre, no avisa a nadie y se hace la foto solo». El PSOE pidió una «unidad real, con políticas reales, no de escaparate».

La representante de IU en el Consejo Local, Elisa Fernández, reprochó al Ayuntamiento la programación de la película La Infiltrada para alumnado de Secundaria, cuestionando su vinculación con la violencia de género al centrarse en ETA y no en la sensibilización contra el machismo.

Asimismo, denunció el episodio vivido durante la manifestación del 25-N, cuando la lectura del manifiesto fue interrumpida por la música navideña de la bola de Zocodover: «Ni siquiera hubo coordinación entre las concejalías para evitar esa falta de respeto».

Fernández anunció que IU presentará alegaciones para aumentar la inversión en igualdad y activar el III Plan de Igualdad. Criticó que los presupuestos de 2026 «vuelven a ser los mismos», limitados al mantenimiento de la Casa de Acogida y del Centro de la Mujer, sin partidas para nuevas políticas.