Alerta por la llegada de dos fotovoltaicas cerca de Toledo

Mientras la portavoz del equipo de gobierno, Noelia de la Cruz, lanzaba este miércoles en una rueda de prensa un mensaje de tranquilidad ya que, según dijo, «no es incompatible esta actividad con el respeto al patrimonio» y garantizaba que cumplirán todos los requisitos legales, el portavoz de IU-Podemos en el Ayuntamiento, Txema Fernández, explicaba a ABC que su grupo desconoce, a día de hoy, el alcance y el contenido de este proyecto, por lo que va a pedir explicaciones en la reunión que celebra mañana lunes la Comisión de Urbanismo. Aunque en el orden del día no figura ningún apartado relacionado con las fotovoltaicas existe un punto «que tiene cierta trampa» y que prevé la aprobación de la modificación puntual número 30 para aumentar la edificabilidad de ciertas naves en el Polígono industrial y también la posibilidad de poder urbanizar en zonas rústicas para que pasen a ser urbanas. «Esperemos que no sea una excusa para permitir a las empresas que en un futuro puedan implantar grandes macro-granjas solares», dijo Fernández, que recordó que su grupo político defiende las energías alternativas, «pero no a cualquier precio». Y, en este sentido, coincide con la Real Academia en proteger el cono visual de la ciudad histórica desde la finca de Zurraquín porque no podemos consentir que «una gran alfombra negra a la entrada de Toledo».

La planta, N, quedaría dividida entre las dehesas de Valdecaba y Zurraquín. En la zona de Valdecaba , en la carretera de Ocaña, no supondría ningún problema,a juicio de la Real Academia, que, sin embargo, alertó de las infraestructuras de evacuación de l aplanta, en Zurraquín, que afectarían no solo a Toledo, también a los términos municipales de Nambroca, Argés, Burguillos, Cobisa, Cedillo del Condado, Cobeja, Mocejón, Villaluenga de la Sagra, Villaseca de la Sagra, Yuncler, Yuncos, Illescas y Ugena, adentrándose también en la Comunidad de Madrid. La Rabacht asegura no estar en contra de la instalación de estos equipamientos, pero considera necesario que haya un debate sobre algunos de los lugares elegidos, ya que las dimensiones de los parques fotovoltaicos superan con creces a la ciudad histórica de Toledo.

Plantean que deben adaptarse no solo a las necesidades técnicas, sino también a las ambientales y culturales, con el fin de no dañar el entorno y proponen un modelo de protección del suelo no urbano a través de las figuras de los conos visuales, que en este caso serían de aproximación a la ciudad.