Anticorrupción tacha de «casi infantil» el argumento de la defensa de Griñán

No estando decidida la postura en ningún caso, las fuentes consultadas recuerdan que son ámbitos distintos. Una cosa es avalar el perdón, por ejemplo, por razones de salud, y otra ver bien que espere ese perdón en su casa. Anticorrupción ha tardado años en conseguir esa condena.

Cabe recordar que José Antonio Griñán dijo ayer no reconocerse en la imagen que devuelve de él el espejo de la Fiscalía Anticorrupción. El expresidente de la Junta de Andalucía no se ve a sí mismo como un «político corrupto» y carga contra el Ministerio Público por catalogarlo con «ese adjetivo descalificativo» cuando «es una evidencia» y «conocido por todos» que él no lo es, detalle que «difícilmente pudiera pasar desapercibido para una fiscalía especializada, acostumbrada a conocer políticos corruptos». En estos términos lo recogió su abogado en un escrito que este condenado por el fraude de los ERE presentó ante el órgano sentenciador de la Audiencia Provincial de Sevilla que debe decidir sobre la ejecución de la pena, una vez que la resolución es firme tras ser ratificada por el Tribunal Supremo.

La defensa del que también fuera ministro, consejero de Economía y Hacienda y presidente del PSOE federal solicita a la Sección Primera de la Audiencia que desoiga el informe del Ministerio Público para «no ingresar en prisión». En un escrito al que ha accedido ABC, solicita que se deje en el aire el encarcelamiento –la pena impuesta es de seis años– hasta que el Gobierno decida sobre el indulto parcial solicitado por su familia o hasta que el Tribunal Supremo resuelva el incidente de nulidad interpuesto como paso previo a un recurso de amparo ante el Constitucional de resultado incierto.

El letrado de Griñán calificó de «altisonantes» e «impropias» las menciones a la corrupción política que recoge el informe de Anticorrupción para rechazar que se suspenda el ingreso inmediato de Griñán y de otros ocho ex altos cargos de la Junta de Andalucía por un delito continuado de malversación de fondos públicos. La Fiscalía también puso de relieve la gravedad de los delitos cometidos en el caso de los ERE, que consideró como «una forma más de corrupción política».