Soy Cordobita

Córdoba es de cine

Córdoba luce y atrae turismo y cine, como hemos visto con el rodaje de una serie histórica: «Resplandor y tinieblas»

Un momento del rodaje de la serie «Resplandor y tinieblas» la pasada semana en Córdoba Valerio Merino

17/08/2020 a las 08:02h.

Para los enamorados de Córdoba , como yo, pasear por sus calles entre su rico patrimonio, es viajar en el espacio-tiempo de una forma emocional, que requiere cierta sensibilidad ya que sus muros susurran cientos de historias íberas, romanas, árabes y judías ... , contadas en los muros encalados por aquéllos hombres que tenían memoria, y recitaban generación tras generación historias , mitos y leyendas, cuentos y letanías que enriquecían la vida familiar y social. El tener vivencias que contar antes un público ávido de emociones aseguraba una deliciosa velada o un trato comercial ventajoso , pues el arte de hablar juglarescamente, era siempre admirado y enseñado en las escuelas de retórica.

Este gran casco histórico que algunos tenemos la suerte de vivir a diario te deja quitarte la camisa de la modernidad al zambullirse en sus callejas y deambular por ellas ajenos al estresante presente e incierto futuro , descubriendo cada día rincones maravillosos, que si fueran cuidados urbanísticamente, enlucidos y limpiados por todos aquellos que cobren el mínimo vital, por ejemplo, no te despertarían de tu ensueño histórico con un manojo de horrible cableado negro colgando de sus blancas fachadas, con pintadas en las paredes y suciedad por todo el suelo, que actúan como jarras de agua fría que te despiertan de ti ensueño.

Y a pesar del maltrato y olvido de sus habitantes, Córdoba luce y atrae turismo y cine , como hemos visto con el rodaje , estos días de una serie histórica, «Resplandor y tinieblas» , realizada por José Luis Moreno , aprovechando la evocación de los baños árabes del Hamman Al Ándalus y de las Caballerizas Reales , dos enclaves que son un lujo en la ciudad, y que versa sobre la vida de San Francisco de Asís, y que rodada en inglés, llevará a Córdoba con su difusión por todo el mundo.

En la maltrecha economía española, la industria del cine es otra pata sobre la que cimentar los muros milenarios de la ciudad, que amenazan ruina constante por la insensible dejadez institucional y el abandono del casco histórico, sin darnos cuenta de que si nuestro patrimonio se derrumba y nuestras cuidadores de patios van muriendo o mudándose a las zonas nuevas, nos quedaremos sin la gallina de los huevos de oro y todo el turismo que mueve y llena hoteles y restaurantes.

¿Por qué está la judería desierta por las noches? ¿Por falta de aparcamientos , por falta de monumentos abiertos, por falta de espectáculos culturales , por falta de aves llenos desde Málaga o Madrid, o por falta de amor a ella de sus habitantes?

¿Acaso no nos gustan las series y novelas históricas , sabe nuestra juventud qué son las Iglesias Fernandinas, os habéis tomado un café en la plaza de Jerónimo Páez entre sus columnas desmoronadas, frente a la enjaulada cavea del teatro romano, la fachada del Museo Arqueológico del Palacio de los Páez de Castillejo y sus variados tesoros, la escalera de los a altos de Santa Ana tintada de bungavillas rosas sobre el blanco y que al subir por sus escaleras te produce hormigueos en la nuca de la densidad, digamos histórica que hay, o te has situado en la inmensa puerta de madera de la Casa del Judío que representa a F ernando III y Pedro I , o acariciado el busto de nuestro paisano Lucano?

Cuando habitas bien tu ser interior y lo construyes peldaño a peldaño, habitas bien tu ciudad y te hace consciente de la suerte que tenemos al heredar un patrimonio así, y de la inmensa responsabilidad que tenemos de habitarlo, quererlo y cuidarlo , para que podamos transmitirlo a las generaciones futuras y no lo tengan que ver virtualmente, porque todo se halla transformado en una casa cubo sueca sin rejas , ni ladrillo viejo, ni madera, ni celosías, ni macetas, ni empedrado.