La silla vacante de la Junta de Andalucía en Córdoba

El nombre de la persona que asuma el cargo sigue siendo, a día de hoy y ante la ausencia de constatación oficial. La diputada María Jesús Serrano , que estaba en todas las quinielas, se cayó del cartel cuando aseguró que estaba bien donde estaba y que nadie le había pedido cambiar de sitio. En el PSOE, la versión más extendida es que esto no es un nombramiento sino una carambola de billar a tres bandas . El partido -por razones políticas y económicas- necesita que se cree un juego de sillas de forma que un cargo libere el sitio para el siguiente destino.

El hecho más relatado es que será delegada del Gobierno. En San Telmo han pedido nombres de mujeres . Este tipo de cargos usan el viejo sistema de la cooptación. Presidencia da el perfil y el partido remite nombres con el objetivo de que sea la cúspide quien elija. Elegir bien a quién se manda forma parte del juego.

Todos los nombres que ahora están en los mentideros forman parte del equipo de apoyo al secretario general, Antonio Ruiz , durante su extraño camino al liderazgo socialista de la provincia. Uno de ellos, quizá el menos conocido, sea el de la parlamentaria Sonia Ruiz , de Encinas Reales. Concejal en la localidad, dio el salto al grupo parlamentario cuando María Jesús Serrano se fue a Madrid. Profesora de idiomas en el Cemer, no consta en su ficha en el Parlamento ninguna intervención en Pleno. De hecho, en el PSOE se reconoce que la primera pregunta cuando se habla de la actual parlamentaria es la siguiente: «¿Quién?». En la Cámara, forma parte de cuatro comisiones y es vicepresidenta de una de ellas, de ignoto proceder, que se dedica al control financiero de los partidos políticos andaluces. El nombramiento permite una salida no traumática en la Delegación de Empleo ya que le sustituiría Manuel Carmona .

Otro de los nombres que ha surgido días pasados fue el de Isabel Lobato . Exalcaldesa de Iznájar, forma parte del equipo de confianza de Antonio Ruiz como jefa de gabinete del presidente de la Diputación. En el Palacio de la Merced se asegura que tiene un papel que va mucho más allá de la mera asistencia al máximo responsable de la institución. Aseguran que es un poder interno en la organización diaria del equipo de gobierno. En esa línea de renovación interna (mujeres jóvenes de la provincia) que parece buscarse, uno de los nombresque apareció tras la salida de Crespín fue el de la actual delegada de Educación, Esther Ruiz , de la misma generación de la portavoz municipal, Carmen González .