María van den Eynde: «Flora tiene muchos novios fuera, pero tenemos claro que su núcleo es Córdoba»

Termina la cuarta edición. ¿Qué balance hacen?

La verdad es que estamos muy contentos con los resultados de la cuarta edición. No tenemos los datos definitivos, pero los provisionales sabemos que es la edición en la que hemos tenido más visitas. Nos hemos sentido abrumados por las colas . Estamos sobre todo muy agradecidos sobre todo a la ciudad por cómo se ha acogido esta cuarta edición del festival.

¿Flora se quedará en Córdoba muchos años más?

Esperemos que sí, y desde luego es nuestra intención. Ahora tenemos que sentarnos corriendo con todos los patrocinadores , empezando por el Ayuntamiento , para definir las líneas del año que viene.

¿Qué se necesita para que Flora se quede para siempre en Córdoba?

Se necesita lo que ha empezado a suceder en esta edición: apoyo de todas las instituciones de Córdoba, empezando por el Ayuntamiento , y apoyo de la ciudad, que es lo que hemos vivido este año más que nunca. Se ha notado, porque en el cartel había en torno a 58 patrocinadores y colaboradores, todos de aquí de Córdoba. Eso es muy significativo de que Flora es un festival que está muy vinculado a la ciudad , y así queremos que siga siendo. Lo que nosotros siempre pensamos y decimos es que el festival tiene que crecer y que el crecimiento de Flora tiene que estar muy pegado al crecimiento de la ciudad. Tenemos que ser capaces de poner nuestro conocimiento al servicio de la ciudad para que a lo mejor dentro de diez años realmente tengamos una ciudad en la que parte de su sociedad pueda vivir de la industria del arte floral .

Dice que este año se ha visto apoyo. ¿Es definitivo o tiene que seguir creciendo?

Tiene que seguir creciendo, para que podamos hacer crecer el festival. Este año teníamos el mismo presupuesto que en 2019, pero yo creo que se nota que el festival ha crecido. Eso viene porque ha habido un sobreesfuerzo tanto del equipo como de las instituciones patrocinadoras para sacar adelante una edición más grande. Para poder seguir creciendo necesitamos traer a nuevos patrocinadores y que los patrocinios que tenemos también se incrementen.

¿Públicos o privados?

De los dos. Todo apoyo es bienvenido. Y no sólo apoyo económico, porque muchos colaboradores pequeños con los que hemos trabajado en esta edición, obviamente no financian el festival, pero sí que aportan su grano de arena a través de los intercambios de sus servicios con el festival.

¿Se contempla que en alguna ocasión el Ayuntamiento esté al frente?

No, creo que igual ha sido un malentendido, porque el Ayuntamiento entiende perfectamente que el éxito de Flora parte de que el equipo del festival es un equipo especializado . Flora es un festival muy especializado, inventado por Zizai Hotels .

¿Le han salido novios al festival fuera?

Sí, Flora tiene muchos novios fuera. Nosotros tenemos claro que el núcleo de Flora es Córdoba, y que el festival está unido de manera indisoluble con la ciudad, pero eso no significa que no podamos hacer acciones en otras ciudades, en otros países, en otros continentes. Llevando siempre por delante la marca Flora y la marca Córdoba.

Porque marca el escenario, ¿no?

Es que Flora surge por Córdoba y nosotros siempre decimos que Flora, por el cariz que tiene de festival internacional, con figuras ‘top’ del arte floral, podría estar en cualquier gran capital del mundo . Pero tiene todo el sentido en Córdoba por toda la tradición que hay en Córdoba en torno al mundo de la flor. Aquí la gente lleva trabajando la flor desde hace siglos, y encima este año ha sido el centenario del concurso municipal de los patios. Nosotros proponemos esa visión vanguardista de lo que es intervenir un patio.

La primera edición tuvo ocho instalaciones y desde entonces se ha reducido hasta las cinco. ¿Se volverá al gran formato alguna vez?

En la primera edición el festival se estaba construyendo y en ese momento había que dar un golpe en la mesa para posicionarnos como festival único de arte floral contemporáneo . En 2019 empezamos a pensar que con menos instalaciones pero con un programa de actividades paralelas que redondease el festival es más interesante, porque es una manera de calar más en la ciudad. El núcleo son nuestras instalaciones florales, que es lo que más llama la atención, pero hay que generar no sólo esas visitas que vienen a las instalaciones florales, sino liderar toda la conversación sobre arte floral contemporáneo. Que no quede sólo en la exhibición: desde 2019 cada artista hace un encuentro con el público , deja su conocimiento en la ciudad, ponemos en valor a los floristas de Córdoba que hacen actividades en el Jardín Botánico y además este año hemos empezado a traer a grandes figuras internacionales del pensamiento botánico, como Carlos Magdalena.