Depende...
Gobiernos paralelos
La falta de autoridad de un alcalde sobre ediles de la coalición que le sostiene acaba pasando factura
José María Bellido y detrás Isabel Albás en una comparecencia ante los medios
Las nuevas aritméticas parlamentarias nacidas del fin del bipartidismo han impuesto los gobiernos de coalición. Con la notable excepción de Galicia, donde el PP gobierna con una sólida mayoría absoluta , no hay Comunidad Autónoma ni ciudad importante con gobierno apoyado por un solo ... partido. De excepción a imponerse como regla. Estos gobiernos plantean no pocos inconvenientes. La autoridad para nombrar y cesar del presidente o alcalde queda tocada y los intereses de partido lo condicionan todo, al imponerse nombramientos basados en las cuotas de poder antes que en la capacidad para el adecuado desempeño del cargo: ¿puede un presidente o un alcalde cesar a un miembro incompetente de su gobierno si éste pertenece a un partido distinto del suyo?
Más allá de la valoración que se pueda hacer de la gestión realizada durante los cuatro años de mandato de Isabel Ambosio , uno de sus errores capitales fue consentir la existencia de dos gobiernos paralelos. Fuese real o no, la sensación de descoordinación era generalizada. Fuese real o no, la impresión de que la alcaldesa lo era sólo sobre una parte del Ayuntamiento, ni siquiera la parte más relevante, cundió en la ciudad. Resulta imposible calibrar el efecto que produjeron tales sensaciones ni si fueron o no la causa de la derrota electoral, pero todo apunta a que no jugaron a su favor. La proyección de falta de autoridad es letal para el gobernante.
José María Bellido , político joven pero experto, fue muy consciente de esos errores y anunció con inteligencia que el gobierno surgido del pacto con Ciudadanos -con Vox en la retaguardia- sería uno y no trino. El desgraciado episodio del Imdeco , denunciado por ABC y objeto de magníficas columnas de Rafa Ruiz, Pepe Luque o Baltasar López, unido a la polémica tramitación de la celebración del partido de la selección o la contratación del World Padel Tour así como a la pobre gestión del área de Turismo (¿algún día tendrá gerente el Imtur?; ¿consentir que los altavoces en Cruces no tengan tregua ayuda a conseguir un turismo «de calidad»?; ¿qué mal han hecho los vecinos del Casco ?) revela con claridad que la amenaza de los gobiernos paralelos y la maldición de la pasada legislatura sobrevuela Capitulares. Una sensible parte del gobierno ocupada por Ciudadanos - deportes y turismo no son cualquier cosa- proyectan escasa pericia gestora.
Decía Feijoo esta semana (perdón por la insistencia en el ejemplo) que militaba antes en Galicia que en el Partido Popular. Así debe de ser. Estoy seguro de que nuestro alcalde también milita antes en Córdoba que en el PP y esa militancia debe llevarle a afrontar la decisión de cesar a quienes no sean los más idóneos , guste ello o no a lo poco que va quedando de su moribundo, aunque hemos visto en Euskadi y Galicia que exigente pidiendo puestos en las listas, socio de gobierno. El pasado reciente así lo aconseja.
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