La comparativa un lustro después es muy llamativa. Los registros se quedaron en 2017 en cinco (un descenso del 28,57% ) con tres mujeres liberadas ( un 62,5 por ciento menos ) y ningún detenido. En este sentido, hay que aclarar que esas cifras no se pueden traducir en una disminución de la prostitución, el proxenitismo y la trata de personas (en muchos casos van de la mano), sino que la actuación policial requiere de siempre de una denuncia . Pero la actividad continúa.
Por áreas, los registros en prostíbulos durante 2014 y 2015 fueron de cuatro por año, mientras que en 2016, el segundo más destacado llegaron a seis. Eso significa que entre 2013 y 2017 la Policía controló 26 locales en total, que no quiere decir que sean diferentes, ya que es normal que se repita actuación en más de uno.
En cuanto a víctimas liberadas fueron en total 28 a lo lo largo de esos cinco años, con dos años especialmente llamativos, que fueron 2013 y 2015, con ocho mujeres cada uno de ellos. En 2014 fueron tres y en 2016 fueron seis.
En cuanto a los proxenetas detenidos sumaron en total entre 2013 y el pasado año una veintena . El año con mayor detenciones resultó ser 2015, con un total de siete, mientras que en 2014 fueron tres y en 2016, cuatro. Lo dicho, en 2017 no se produjo ninguna detención, a pesar de que sí se controlaron prostíbulos y se liberaron algunas víctimas.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete