Antonio Ruiz: «La situación de las residencias de ancianos ha sido la de mayor dramatismo»

Su mandato comenzó enfocado al despoblamiento pero el virus lo ha cambiado todo.

Para todo el mundo, también para la Administración local. Estamos ante una situación que nadie había previsto, donde no hay manual de instrucciones ni libro de buenas prácticas. Hemos ido tomando decisiones sobre la marcha, sin red. Todo es nuevo. En la Diputación , hemos intentado estar al lado de los ayuntamientos que es lo que nos corresponde. Sobre todo, en materia de prevención y desinfección , de dotar a los municipios de material de protección. En esta segunda parte, de crisis pretendemos dotarlos de recursos económicos por medio del plan 10 para que tengan esa posibilidad de respuesta.

¿Qué le impresionó de los días en los que los casos no hacían sino crecer y se acumulaban las muertes?

La situación de las residencias de ancianos, mucho. Desde los ayuntamientos pedíamos que se le hicieran los test y, en el caso de Rute [del que es alcalde], no se hicieron hasta el diez de abril. En esas fechas, las cifras ya eran dramáticas: 57 residentes y 13 trabajadoras . Ha sido la situación de mayor dramatismo y complejidad. Desde la Diputación, pusimos a disposición de todas las residencias de la provincia la posibilidad desinfectarla. En las que lo quisieron, hemos hecho ese trabajo hasta ocho veces con una empresa especializada. Entendiendo, además, que el virus no entiende de privadas o públicas. Ahí están nuestros mayores y tenemos que prestar esa atención aunque no sea nuestra competencia.

¿Qué planes tienen ante posibles rebrotes en otoño e invierno?

En la primera parte de esta crisis, hemos dotado de recursos y luego hemos mirado la contabilidad. La urgencia ha determinado el gasto. Esta crisis se diferencia de todas en que, por primera vez, se ha hecho frente con inversión y gasto en vez de recortes y austeridad. Parte de nuestros recursos se han ido a cuestiones no previstas. Desde la ley Montoro , tenemos muy limitada la capacidad de gasto ante cualquier rebrote. Hemos sido precavidos pero, si eso se produce, estaríamos más desarmados. Habría que recurrir a líneas de crédito .

¿Tiene noticias del Gobierno sobre el uso de superávit?

La FEMP ha tenido varias reuniones con el Gobierno. El municipalismo reclama lo que siempre ha reclamado. Que nos dejen usar nuestros ahorros . Somos responsables, cumplimos la norma, generamos un ahorro pero luego no podemos usarlo. La urgencia está más que justificada y espero que haya sensibilidad por parte del Gobierno central para poder usar remanentes y superávit. Hubo un primer paso, el 20% del superávit para temas sociales , y solo espero que en el futuro se permita usar en su totalidad.

La Diputación tiene un ratio de deuda muy bajo. No tendría sentido dedicar dinero a reducirla.

Nosotros no vamos a tener ese problema. Llevamos años con una ejecución presupuestaria muy alta, del 80%, como nunca se había hecho en esta casa. El margen de superávit es limitado. Ya no damos ni 40, ni 60 millones. Ejecutamos lo de cada año.

¿Qué grado de ejecución tiene el Córdoba 10? ¿Han pagado ya las ayudas a autónomos?

Las ayudas a autónomos están concedidas y en periodo de exposición previo a su pago a los solicitantes. Sobre el Córdoba 10, hemos pagado el cincuenta por ciento de diez millones están en las cuentas de los municipios. Han presentado sus proyectos ligados al empleo , políticas sociales o mantenimiento del pequeño comercio. Cuando esos proyectos estén ejecutados, tenemos el compromiso de ingresar los cinco millones restantes.

Lleva tiempo quejándose de la falta de comunicación con la Junta. ¿Ha tenido algún contacto, por ejemplo, por la decisión adoptada sobre la autovía a Jaén?

No ha habido consulta, nos enteramos por la prensa. Y es curioso porque, con el tema del coronavirus en Córdoba , la coordinación institucional ha sido total independientemente del color político. Con el Gobierno de la Junta , en Sevilla, la comunicación es nula . Al presidente de la Junta le he mandado ya siete cartas y solo me ha respondido a una. Y eran todas sobre medidas urgentes como la dotación de planes de protección o planes de empleo. Por eso no he asistido a la Comisión de Reconstrucción del Parlamento . Me parecía un sinsentido que nos nos tengan en cuenta para nada por no hablar de que la preside un grupo que no la quería y que votó en contra.

El alcalde de Córdoba ha hablado muy bien de usted. Y de temas ajenos al coronavirus.

Ya le digo. Las relaciones han sido, durante el estado de alarma, fructíferas con todo el mundo. Han sido magníficas y todos tenemos una buena relación pero el Gobierno de la Junta no ha aparecido.

¿Tienen algún plan para reactivar las ferias comerciales?

Como organizadores estamos de la mano de los sectores. Es el caso de Intercaza o Expomiel . Este año está prácticamente perdido. Pero tenemos que aprovechar otros espacios de la ciudad -como el Palacio de Congresos - distintos. No es una cuestión que nos corresponda a la Diputación a pesar de que son un instrumento de promoción. Otras instituciones tienen que asumir más protagonismo en esta materia.

¿Por qué destituyó a los gerentes para nombrar a personas de perfil en el partido?

-Entra dentro de la normalidad. Cuando el PP gobernaba en esta casa, el gerente del Consorcio de Bomberos había sido diputado provincial por Lucena. El gerente del Instituto de Desarrollo Económico era el actual delegado del Gobierno de la Junta, A ntonio Repullo . Nunca lo he criticado, exigen la máxima preparación y confianza. También política. Intento rodearme de esas personas. El PP siempre critica lo que hace. Lo critica cuando lo hacen otros. Hemos contado con gerentes que no tenían nada que ver con el PSOE cubriendo etapas muy productivas, como en Turismo o en Emproacsa . Todo es criticable por el PP. Hoy he firmado convenios con entidades deportivas cuando el diputado del PP Agustín Palomares había dicho que no iba a ver subvenciones deportivas. Es falso.

¿Qué supone la entrada de Ciudadanos en el gobierno municipal de Puente Genil?

Una posibilidad para la estabilidad en Puente Genil . Como secretario general, he abogado siempre por la estabilidad porque es importante para los proyectos. Tenemos un pacto con IU donde fuese posible, donde no vamos a buscar otras opciones. La ciudadanía nos dice que hablemos entre nostros. Y eso se corresponde con la realidad electoral. Tenemos que acostumbrarnos a pactar .

¿Cómo se ha tomado Sevilla que pacte con una pata del «trifachito?

Nosotros estamos coordinados siempre. Pero que en Puente Genil se llegue a un acuerdo que redunda en beneficio de los vecinos y vecinas, no quita que al Gobierno de la Junta se le pueda seguir llamando «trifachito» . Se apoyan en la ultraderecha. Recomiendo «Baron noir» , la serie de HBO. Explica que, en Francia, ante la posibilidad de que gobierne el Frente Nacional , el resto de partidos democráticos se une. En España no ha pasado. El PP está más que dispuesto a echarse en brazos de Vox. Un partido de derechas pero democrático no tiene pudor en pactar con un partido de derechas con esos postulados.

Sus socios, IU, están en un momento raro. ¿Cómo les va la convivencia interna?

IU tiene mucha implantación en la provincia y aquí la relación es muy positiva. Tenemos un pacto que respeta las diferencias, no implica la fusión de identidades . Cuando dos grupos de izquierda nos ponemos de acuerdo, la ciudadanía lo nota. Cuando varios grupos de derecha y ultraderecha se ponen a trabajar juntos, como ocurre en la Junta, por desgracia se nota.

¿Hubo órdenes a técnicos municipales donde gobiernan para que boicotearan reuiones con la Junta sobre ayudas sociales en tarjeta monedero?

Si por boicot entiende no acudir, es posible que se hayan dado pero no me consta. No estamos de acuerdo con esa política. Son 3.000 tarjetas de 150 euros en toda la provincia, un volumen pobre de recursos. Pero es que los ayuntamientos no pueden quedar ajenos a la evaluación porque eso supone el desmantelamiento de los servicios sociales. Es irresponsable.

El ingreso mínimo vital no ha tenido en cuenta la opinión local.

En la gestión, sí. Los servicios sociales son los que mejor conocen la situación de las familias más necesitadas . Cualquier política social contra la exrema pobreza tiene que contar con la opinión del que conoce el día a día.